El Senado brasileño aprobó esta madrugada someter a la Presidenta Dilma Rousseff a juicio de destitución. De aprobarse la medida, la mandataria debería dejar su cargo antes de fin de mes.
Se trata de una de las dos sentencias cautelares que suspendieron el proceso para que el ex presidente brasileño se transformara en el nuevo ministro de la Casa Civil, decisión que fue tomada por el Tribunal Regional Federal ante la apelación presentada por el Gobierno.
En medio de las críticas y cuestionamientos por los casos de corrupción que se investigan en el país, el ex presidente asumirá como secretario de Estado en la Casa Civil, lo que le permitirá modificar el gabinete de Dilma Rousseff.
Como parte de su visita oficial, la presidenta brasileña, cuyo gobierno se encuentra inmerso en una compleja crisis política, ligada al escándalo de corrupción que afecta a la estatal Petrobras, se reunió con uno de los directores de la cuestionada empresa papelera, de propiedad del empresario Eliodoro Matte, investigada por colusión. Esto, considerando que se trata de la empresa chilena con mayores inversiones en ese país.