La normativa supranacional es obligatoria para Perú, Ecuador, Bolivia y Colombia y busca simplificar la movilidad entre esos países. Tres expertos en materia migratoria analizaron el Estatuto y lo compararon con la política migratoria chilena, la conclusión es la misma: el Estado de Chile debe enmendar el rumbo y enfrentar el fenómeno migratorio en conjunto con las naciones vecinas.