El gobierno decretó zona de catástrofe a la Región de Los Lagos por la presencia de esta marea roja que ha afectado el área durante las últimas semanas, causando grandes pérdidas en recursos para los pescadores artesanales.

El doctor Suárez señaló que el laboratorio cuenta con sedes que se ubican en Santiago y Castro, y aclaró que estos eventos en el archipiélago de Chiloé aparecen desde 2002, pero se repitieron en 2006 y luego en 2009 con menor intensidad.

“Es un problema muy complejo, casi imposible de predecir, pero ya tenemos información de las regularidades anuales de cuando estas cosas pueden ocurrir, y hay meses de mayor riesgo, justamente entre enero y mayo de cada año donde estas células proliferan y pueden, en algunos casos, dar lugar a presencia de toxicidad en los moluscos que las han filtrado y acumulado”.

El investigador reconoció que éste es un problema social, económico y biológico que se debe abordar de manera interdisciplinaria. Por ahora, el llamado es a no consumir los productos del mar afectados como los choritos, cholgas, almejas, machas y locos. Esto, mientras exista la alerta sanitaria.

“Hay que entender que el riesgo existe, pero a veces la comunicación del riesgo se ve impedida por lejanía, por falta de información, por confusión o porque no se llega a todos los lugares. En este momento, nosotros como laboratorio de la universidad nos preocupa mucho el riesgo que enfrentan poblaciones costeras, relativamente aisladas, en la costa de Los Lagos hacia el norte del canal de Chacao, en la zona de Los Ríos e incluso más al norte, que son zonas cuyos habitantes nunca han experimentado este fenómeno”

Benjamín Suárez explicó que se presentaron “dos olas continuadas” de marea roja: “El primer fenómeno duró seis semanas con toxicidades bien elevadas. Este es más intenso, y probablemente ya llevamos dos semanas de esto y todavía nos pueden quedar cuatro a seis hasta observar desaparición de la toxicidad, y eso es lo que estamos monitoreando diariamente. A nuestro laboratorio llegan docenas de muestras que tienen que analizarse contra el tiempo para generar la información de alerta para los servicios de salud, el Sernapesca, los productores y la población lo antes posible”.

Días antes del anuncio del gobierno, los pescadores artesanales solicitaron al Ejecutivo decretar zona de catástrofe para enfrentar la cesantía. La ayuda económica considera solo a 500 familias afectadas de la región.