Vivir sobre un país como una grieta gigante que se puede abrir en cualquier momento, con una tierra que está en permanente movimiento, temblando, incendiándose, cambiando. Una violencia que surge desde el seno de la tierra y que, por cierto, tiene un correlato en las condiciones, en la forma de vida y en la debacle de sus instituciones.

Este Chile, es el que aparece, que inspira y que conjuga al dúo de electro pop compuesto por los hermanos Diego y Damián Noguera, País Violento.

“El nombre lo pensamos en términos más abstractos. Obviamente se refiere a Chile, a su violencia institucional, pero también a nivel telúrico es un país donde ocurren terremotos y todo ese tipo de cosas. De ahí también el nombre  del disco [Tagadá], se refiere al país, pero también se refiere a otras cosas, a otro tipo de fronteras que no necesariamente son una nación, pueden ser fronteras emocionales”, explicó en entrevista con Radio Universidad de Chile, el músico Damián Noguera.

Por su parte, el también músico y actor, Diego Noguera agregó que “es algo como una política emocional, por decirlo de alguna manera, dentro de la cual este país violento va a adquiriendo distintos pesos y distintas formas. Como bien decía el Damián, es un país violento que no solamente existe en lo político, sino que también en lo geográfico”.

Este jueves, el dúo lanzará su primer disco titulado Tagadá. El trabajo fue compuesto y producido por los hermanos Noguera, y es el resultado de dos años de un intenso trabajo que consistió en tomar la experimentación sonora, que previamente habían hecho ambos artistas en composiciones para cine y teatro, y ponerla al servicio de canciones pop.

En este sentido, el dúo reconoce la influencia de los grandes artistas de Chile, aunque no tanto en las formas, sino más bien en cierta mirada, en cierta forma de entender las cosas.

“Hay una experimentación muy fuerte en la música que hace Violeta Parra y en ese sentido es para nosotros una referencia enorme. Lo que ella hace es pura experimentación puesta en un formato folclórico. Nosotros hacemos una experimentación que la ponemos en un formato pop. Ella experimentó dentro de un formato y en ese sentido, para nosotros ha sido una influencia muy muy grande y también en un momento incluso nos planteamos no tener letra, pero si ya vamos a tener letra, esa letra tiene que ser significativa, tiene que ser fuerte, tiene que decir algo”, apunta Diego, a lo que Damián agrega un aspecto central: “Lo folclórico no solamente tiene que ver con una estética, que está ligada generalmente con una guitarra de palo. Lo folclórico tiene que ver con investigar un país, un territorio”.

Retratos 

Las letras de Tagadá fueron escritas por el poeta, dramaturgo y guionista Pablo Paredes. Con el 80 o 90 por ciento de la música hecha, Paredes se incorporaba al proceso de composición.

“Con Pablo fue súper interesante cómo él iba mostrándonos distintas posibilidades para una música que habíamos hecho y eso fue bien increíble en el proceso de trabajar con él. Como que a través de sus palabras se explicaron o se concretaron momentos musicales. Esta colaboración fue súper interesante”, señala Diego.

Por su parte, Damián contó que en algún momento pensaron en hacer sólo música, sin letras. Pero que en este proceso de hacer canciones, decidieron incluirlas. Así, resultaba para ellos fundamental, que la música diera cuenta de los conceptos centrales de la banda y que tuviera algo que impactara. “Por eso eran tan importantes las letras para nosotros, porque por muy experimental que una música pueda ser, si expresa una emoción concreta se entiende al tiro también, el terreno de las letras en la música es un terreno muy emocional”, declara Damián.

Otro aspecto llamativo de País Violento son sus videoclips. Realizados por Paulina Giustinianovich de Enciclopedia Color. En ellos se observan planos fijos de partes de ciudades del país o algunos de sus elementos distintivos.

“Los vídeos son retratos de lugares. Exploramos ese formato con la cámara fija, que es todo lo contrario a lo que uno, a primera instancia,  se imaginaría de un videoclip:  que va al ritmo de la canción, con un montaje rápido si la canción es rápida, por ejemplo”, explica Diego.

Tocar en círculo

El concierto de este jueves, será la primera oportunidad en que País Violento se presentará en vivo. Para esa noche están preparando un show de cerca de 45 minutos con una puesta en escena de Claudia Yolin, que buscará combinar la música con un montaje lumínico y sonoro potente.

“Tempranamente en el proceso de ensayo decidimos que para tocar en vivo queríamos formar una banda”, recuerda Damián. En esta oportunidad los hermanos se presentarán con Orlando Guerrero y Daniel Marabolí. Todos los integrantes del set en vivo tocarán sintetizadores, percusiones, guitarras y voces.

De esta manera, la música electrónica (preponderante en el disco) adquiere vida y fuerza en vivo. Además, se presentarán con el público formando un círculo con los músicos, como una forma de trazar una experiencia marcada por el objetivo de reducir toda clase de distancia.

“El concierto se realizará en un círculo en el cual se desarrolla una idea en el cuál la gente sea parte del concierto, que no haya un escenario que genere una distancia entre nosotros y el público. Que todos seamos parte de la misma cosa”, relata el músico.

En la misma línea, Diego señala que es la primera que vez que tocan en vivo: “Por eso para nosotros es fundamental hacer un ritual ‘con’ las personas, y no ‘frente’  a las personas que nos estén viendo. Desde esas ganas surgió la idea del círculo. Tocar en un círculo sobre el Río Mapocho es muy importante por todo lo que puede llegar a significar ese río”, dice.

El lanzamiento de Tagadá, el primer disco de Pais Violento, está previsto para este jueves 22 de diciembre a las 22 horas en el Teatro del Puente.