Las negociaciones en la Cumbre del Cambio Climático de las Naciones Unidas se mantienen paralizadas, a sólo tres días de su culminación, y sin indicios de avances sobre un acuerdo que regule las emisiones de gases de efecto invernadero.
Está previsto que la Presidenta de la conferencia, la danesa Connie Hedegaard, se reúna con varias delegaciones para intentar lograr un consenso y evitar un fracaso, que obligaría a irse con las manos vacías a más de un centenar de líderes políticos, luego que las conversaciones, que comenzaron el 7 y concluirán el 18 de diciembre, tomaron un claro cariz de enfrentamiento entre los países industrializados y en desarrollo.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, hizo un llamado a todas las partes para que abandonen las tácticas dilatorias e impidan en fracaso de esta cumbre.
Las 192 delegaciones tenían como base de trabajo dos borradores sobre la financiación de los "países ricos" a los pobres para mitigar las consecuencias del cambio climático, en el que no aparecían cifras, además de otro texto con los porcentajes a negociar de las emisiones globales de dióxido de carbono (CO2) hasta 2050.