Con la ratificación que realizó la Democracia Cristiana de su adhesión al paro nacional convocado por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para este 24 y 25 de agosto, la Concertación en pleno comprometió su respaldo a esta iniciativa que, además, cuenta con el apoyo del movimiento estudiantil.
Los dirigentes de oposición comunicaron durante el fin de semana su interés de plegarse a estas jornadas de movilización, quedando pendiente sólo la postura de la DC. Finalmente, este lunes el presidente de la colectividad, Ignacio Walker, comunicó que teniendo en cuenta la postura del Frente de Trabajadores de la falange, decidieron sumarse al paro.
Además, Walker sostuvo que la DC adhería “a las principales demandas del movimiento sindical y estudiantil”, que incluyen una reforma constitucional, laboral, educacional y tributaria”. Según el senador, “ellas representan el sentir de la inmensa mayoría de chilenas y chilenos”.
En esa línea, el dirigente falangista emplazó al Gobierno a escuchar las demandas de los movimientos sociales.
“Antes de recurrir a la descalificación de dirigentes sociales y políticos y de rechazar sus peticiones de plano y a priori, la respuesta del Gobierno debiera ser la de promover el debate por las vías institucionales que nuestra democracia debe saber emplear a tiempo. El PDC insta al Gobierno a romper con la inercia y la pasividad que ha caracterizo a su gestión y que comience a escuchar a los trabajadores y estudiantes porque ahora sólo tiene oídos para los empresarios”, dijo Walker.
Sin embargo, este respaldo no fue bien recibido en el oficialismo. De hecho, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, no dudó en catalogar a los dirigentes de la Concertación como “oportunistas” y realizó un llamado a velar por el interés general del país.
En la misma línea, el vicepresidente de Renovación Nacional, Francisco Chahuán, sostuvo que la oposición no puede renunciar a su deber de representar a todos los chilenos y llamó a los partidos a asumir la responsabilidad frente a las eventuales consecuencias que pueda tener este paro para una parte de la población.
“La Concertación no puede abdicar de su legítimo derecho de representar a todos los chilenos y creemos que con estas actitudes lo que hace es no reconocerse como un interlocutor válido para poder leer adecuadamente lo que está pasando en la calle. La ciudadanía nos está pidiendo urgente acuerdos nacionales y lo que están haciendo es renunciar a representar a una gran parte de los chilenos y, por lo tanto, tienen que hacerse responsable de lo que suceda en la movilización”, sostuvo Chahuán.
Por su parte, el presidente de la UDI, Juan Antonio Coloma, lamentó la decisión de la oposición y comentó que “este es un paro que ha convocado básicamente el Partido Comunista y la CUT, y que lamentablemente ha tenido el apoyo de dirigentes de la Concertación, que se han visto cada vez más tironeados hacia la izquierda en Chile”.
De todas formas, algunos de los presidentes de partidos como Osvaldo Andrade del PS, incluso manifestaron su interés de participar en las marchas, lo que tampoco fue descartado por el presidente del Senado, Guido Girardi (PPD) y el vicepresidente de la Cámara Alta, Juan Pablo Letelier(PS).
En tanto, desde el PPD y el Partido Radical aseguraron que están evaluando la mejor forma de participar en las movilizaciones, mientras el presidente del Partido Regionalista Independiente (PRI), Pedro Araya, hizo un llamado al Ejecutivo a “no tenerle miedo al clamor de la ciudadanía que exige cambios para un Chile más justo, más solidario donde se respeten realmente los derechos de los trabajadores y de las grandes mayorías”.