El año de la movilización social se inició el 11 de enero, día en que Magallanes paralizó sus funciones en rechazo a la política de Gobierno respecto a subir las tarifas del gas en la zona, una medida que fue rechazada por toda una comuna que se rebeló desde el sur del país.
El conflicto trajo una fuerte crisis al interior del Ejecutivo, con un cambio de Gabinete y el inicio de un sostenido rechazo a Sebastián Piñera. Los magallánicos tampoco olvidan el triste saldo de dos jóvenes que fallecieron atropelladas durante manifestaciones nocturnas.
El Gobierno inició una mesa de trabajo que permitió bajar una paralización completa de ocho días, un levantamiento popular al que adhirieron parlamentarios y autoridades políticas de la zona, además de personeros religiosos y líderes sindicales.
El senador independiente Carlos Bianchi, apuntó que el Ejecutivo dilató las soluciones con un proyecto de ley que fijará la tarificación del gas, y solicitó sumar urgencia al documento para evitar que este enero nuevamente los magallánicos salgan a la calle.
“El tema del gas en Magallanes pudo y tuvo que haberse resuelto sin el paso de una ley por el Congreso, sino que sólo con la voluntad del Presidente, para que en la Ley de Presupuesto vayan los dineros necesarios para la subvención. Espero que el Ejecutivo pueda colocar la urgencia debida para tener la tranquilidad de tener una proyección en el tiempo, donde se nos permita tener un precio especial respecto a tan vital elemento”, declaró el parlamentario.
Entre las demandas del movimiento ciudadano está el potenciar la Empresa Nacional del Petróleo, y emplazan al Gobierno por una política que disminuye su participación en las políticas energéticas, pasos previos a una privatización de la petrolera estatal.
El presidente del Sindicato de Trabajadores de ENAP Magallanes, Alejandro Avendaño, señaló que a la administración de Piñera le toca dar solución definitiva a un problema que año a año ha sido postergado incluso por gobiernos anteriores.
Avendaño subrayó que “el problema no está solucionado, mientras no salga la ley de tarificación, no hay solución. El Gobierno está solucionando el problema año a año, como ha pasado hace tiempo, este problema no surgió con el cambio de Gobierno y debió ser solucionado por gobiernos anteriores pero nunca se hizo. Le tocó a este Gobierno enfrentarlo, pero hay responsabilidades para atrás en el sentido de no dar solución antes y estar año a año tratando de solucionar el tema”.
Por otro lado, el presidente de la Asamblea Ciudadana de Magallanes, Carlos Haro, destacó los avances de un movimiento que no está dormido, y subrayó las reuniones con distintos parlamentarios durante el año, además de una serie de actos públicos durante enero 2012.
El dirigente apuntó que el Ejecutivo “hasta este minuto no satisface nuestras demandas, y esperamos que el Parlamento acoja las indicaciones que hará la Comisión de Energía. Nosotros estuvimos reunidos con la senadora Ximena Rincón, a quien le expresamos las inquietudes y quedó atenta a un trabajo futuro entre su participación parlamentaria con la Asamblea Ciudadana en Magallanes”.
La relación del Presidente Sebastián Piñera con el pueblo magallánico se ha mantenido distante, una situación acrecentada con las posteriores visitas del Mandatario al extremo sur, donde ha eludido la presión de la gente, sin reunirse tampoco con sus líderes sociales.