La investigación de Ciper Chile dio a conocer detalles del caso, conocido como “los 19 fusilados de Laja”, por el que un juez procesó el año pasado a 14 oficiales de carabineros que presuntamente participaron en la matanza.
Catorce de las víctimas eran trabajadores de la planta Laja de la Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones (CPMC), detenidos después del golpe militar de Augusto Pinochet en las localidades de Laja y San Rosendo.
La firma es controlada por el grupo Matte y tiene además presencia en Argentina, Uruguay, Brasil, Colombia, Perú y México, y durante el gobierno de Salvador Allende (1970-1973) sufrió varios intentos de expropiación de sus fábricas.
Según la investigación, los hechos ocurrieron el 18 de septiembre de 1973, cuando carabineros de Laja ejecutaron por la espalda a 19 personas detenidas y torturadas en los días previos, incluidos 14 trabajadores de la Papelera, dos profesores y tres estudiantes.
Al mando de los carabineros se encontraba el teniente Alberto Fernández Michell, cuyos hombres condujeron a los detenidos hasta un bosque, donde los fusilaron y sepultaron sus cadáveres en una zanja cavada por ellos mismos.