La Red de Organizaciones Ambientales de Panguipulli y comunidades mapuche del lago Neltume presentaron al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Los Ríos un informe que explica las vulneraciones a los DD.HH. del pueblo mapuche y a la Reserva de la Biósfera de los bosques templados lluviosos del sur de Chile de la central hidroeléctrica Neltume, a cargo de la empresa Endesa Enel.
Además, presentaron una solicitud para que la Comisión de Evaluación Ambiental de Los Ríos inicie un proceso sancionatorio contra Colbún producto de las fallas en sus informes geológicos y la inexistencia de roca madre que sostenga el muro de la represa del proyecto San Pedro.
Guido Melinao, dirigente de la comunidad Valeriano Cayicul, insistió en que la central de pasada Neltume, en la precordillera de la comuna de Panguipulli y con una potencia aproximada de 490 MW, no ha respetado a las comunidades de la zona: “Ellos han profanado el lugar en que se hace la ceremonia mapuche, es una profanación de nuestra actividad cultural. Realmente no han respetado la Ley Indígena como la dictó la Bachelet. Estamos muy molestos por las mentiras que han hecho en este proyecto. Estamos en contra”, dijo.
Melinao agregó que esta iniciativa vulnera derechos de los pueblos originarios reconocidos en la Declaración Universal de Pueblos Indígenas de ONU y el Convenio 169 de la OIT y las recomendaciones del Relator Especial de ONU.
En esto coincidió Jorge Weke, werkén del Parlamento de Coz-Coz, quien también lamentó que el traslado del palenque desde el sitio sagrado o rewe haya sido consultado sólo a la comunidad Juan Quintumán y no a otras del sector.
Weke añadió que el proyecto de Endesa Enel se sitúa en un sitio de interés turístico, lo que incluso fue mencionado por el intendente Juan Andrés Varas en un oficio enviado al SEA el pasado 16 de mayo.
En el caso de la central San Pedro, de Colbún, las agrupaciones pidieron sanciones y un plan de recuperación a la cuenca del río San Pedro. Weke explicó que “hay miles de metros cúbicos adicionales que sacaron después de la aprobación, de modo que el proyecto perdió la naturaleza que tenía. Por eso solicitamos un proceso sancionatorio contra la empresa, que se exijan las máximas multas por el daño causado en la ecología y por no considerar las características geológicas, ya que hay una falla y mucha sismicidad. Lo otro es que esta sanción concluya con la revocación de la calificación ambiental del año 98”.
Los dirigentes, que pretenden evitar que se produzca un “nuevo Ralco”, adelantaron que el 14 de junio se reunirán con delegados de las embajadas de Italia y España, de donde provienen los capitales de Endesa Enel, y que seguirán trabajando en la región de Los Ríos informando a la población sobre los eventuales efectos de estos proyectos.
A esto se sumaría una posible reunión entre la delegación mapuche y representantes de la Unión Europea en la Cumbre de la CELAC en Santiago en enero de 2013, luego de las gestiones realizadas por Jorge Weke en el Parlamento Europeo hace algunas semanas.