Un grupo de pobladores de la localidad de Pedregoso, sector cordillerano de la comuna de Lonquimay, bloqueó la ruta que lleva al paso Pino Hachado, en protesta por la demora en la construcción de una escuela para la zona.

Los habitantes, en su mayoría pertenecientes a la etnia pehuenche, reclaman la demora en la reconstrucción de la escuela Malalmahuida, siniestrada en 2009, y de las mejoras en los establecimientos de Domingo Camargo, de la zona de Mallin del Treile y de Cruzaco del sector del mismo nombre.

Gladys Smith, vocera del movimiento, señaló que “en el internado de esta escuela se han estado haciendo salas de emergencia que en el invierno se gotean, los niños tienen que estar saltando las pozas, se entumen, porque no hay condiciones buenas para que estén estudiando. Los consejeros regionales vinieron a ver la sala y encontraron que era indigno que los niños estudiaran ahí, por eso creíamos que la aprobación saldría pronto, pero nos encontramos con la sorpresa de que hay nuevas observaciones”.

El municipio de Lonquimay presentó un proyecto de reconstrucción al gobierno regional, el cual ha sido rechazado en múltiples ocasiones debido a observaciones técnicas.

Las últimas indicaciones apuntan a los costos del proyecto, por lo que la Intendencia solicitó disminuir el monto del mismo, además de reducir el espacio por niño de 1,2 a 1,1 metros cuadrados.

Para Gladys Smith, existe una guerra entre el gobierno regional y comunal que ha entrampado al proyecto: “Es por eso que nosotros creemos que el gobierno regional no tiene la voluntad para aprobar este proyecto, que es necesario, y es una lucha justa que estamos dando. Estamos esperando una respuesta del intendente, pero hasta el momento no hemos tenido respuesta alguna. Si esto sigue así, nuestra movilización va a seguir adelante y vamos a tomar medidas más al choque aquí en el sector”, advirtió.

Por su parte, el alcalde de Lonquimay, Guillermo Espinoza, acusó a la intendencia de La Araucanía de no querer recibirlos y de manipular el proyecto de reconstrucción: “Él (intendente) no recibe al municipio, ha actuado como patrón de fundo en la región. El movimiento tiene voceros y ellos en forma autónoma están desarrollando este proceso y se están relacionando directamente con el gobierno regional. Obviamente estaremos presentes si el intendente viene a dar la cara, porque si no han querido venir es porque saben que están mintiendo y manipulando el proyecto”, sostuvo.

Actualmente asisten alrededor de cien niños a la escuela, que estudian improvisando salas en el internado. Además, la estructura del establecimiento que se salvó del siniestro data de 1977, por lo cual la escuela no cumple con los estándares mínimos que exige el ministerio.