El lunes los cuatro prisioneros mapuche de Chequenco cumplieron un mes en huelga de hambre. Ya han bajado en promedio nueve kilos de peso y dos de ellos están presentando cuadros de taquicardia.
Aún así, afirmaron que no darán su brazo a torcer, exigiendo que se revisen los procesos contra los comuneros Levipan y Levinao, además de la devolución del territorio al pueblo mapuche, el fin de montajes político-judiciales, la desmilitarización, la libertad de todos los presos políticos y el fin a la violencia que ocurre durante allanamientos a las comunidades.
“Avanzaremos en defender nuestro derecho con la vida y responsabilizamos al Estado chileno, encabezado por el Presidente Piñera, de negarnos el derecho a un debido proceso, a la presunción de inocencia y a respetar los acuerdos internacionales que firmaron para la protección de nuestro pueblo”, señalaron los dirigentes en un comunicado público al cumplirse un mes de esta medida de presión.