Rossana López Tenderino, de 30 años, murió el pasado domingo luego de ser golpeada brutalmente y ahorcada por su esposo, Germán Vidal Monardes, un ingeniero de 32 años motivado por una supuesta infidelidad.

Con este hecho se alcanzan 29 femicidios en lo que va del año, igualando la cifra de este tipo de crímenes que sucedieron durante el 2011, pero mostrando una baja de 21% de estos delitos respecto al 2010.

Fue en ese año cuando se aprobó la tipificación de este delito, ocasión en que las autoridades manifestaban que la normativa generaría un cambio cultural respecto de la violencia contra las mujeres.

Sin embargo, Teresa Valdés, coordinadora del Observatorio de Género y Equidad, lamentó que la violencia de género se hace visible sólo en los casos de femicidios, ya que según declara, éstos son solo “la punta del iceberg de una realidad que es enorme, donde desgraciadamente la justicia no tiene las condiciones para tomar las medidas de protección de las mujeres”, según Valdés, “porque la ley que tenemos no tiene los recursos suficientes”.

Teresa Valdés agregó que los esfuerzos de prevención es una tarea a la que debe abocarse toda la sociedad, “desde que los niños son muy pequeños, enseñarles que los conflictos se resuelven por la vía del debate y la negociación y no por la violencia”, señaló.

Por otra parte, Soledad Rojas, coordinadora de la Red Chilena Contra la Violencia Doméstica y Sexual, coincidiendo con la idea de que el femicidio es “la punta del iceberg” de este fenómeno, llamó a comprender toda la complejidad de la violencia contra las mujeres, la que “está instalada en la vida de las mujeres desde que nacemos hasta que morimos, y muchas mueren asesinadas”, aseguró.

Asimismo agregó que un problema de la ley es que “redujo la violencia hacia las mujeres al espacio privado”, descuidando y no considerando “las multiples violencias que sufren las mujeres en el espacio público y dentro de ellas la violencia sexual”, señaló.

Frente al caso de la mujer muerta en la comuna de Ñuñoa, también se pronunció el Gobierno, y fue la ministra del Sernam, Carolina Schmidt, que llamó a aumentar las denuncias ya que en el 73% de los casos no existe una advertencia previa.