La Corte de Apelaciones de Santiago decidió durante la mañana del martes la paralización de la construcción de la Central Termoeléctrica Punta Alcalde, al acoger la orden de no innovar interpuesta por la Federación de Sindicatos de Trabajadores Independientes de Pescadores Artesanales, Algueros, Buzos mariscadores y afines de la provincia de Huasco, en la región de Atacama.
Esto, debido a que el proyecto rechazado el 25 de junio de 2012 fue nuevamente aprobado el 3 de diciembre por el Comité de Ministros, integrado por los titulares de Energía, Minería, Salud, Economía, Agricultura y el Subsecretario de Medio Ambiente.
La noticia fue bien acogida en la municipalidad de Huasco, cuyo alcalde, el PPD Rodrigo Loyola, declaró que espera que “en los alegatos posteriores podamos revertir definitivamente este proyecto, que consideramos que su impacto ambiental es algo que no se puede aceptar dentro de nuestra comuna”.
“No por los problemas de crisis energética que tiene el país podemos estar exponiendo la salud de las personas”, prosiguió el alcalde, quien además llamó a no olvidar la responsabilidad ambiental que tienen todas las autoridades del país.
El director general de la ONG Oceana, Álex Muñoz, también celebró la determinación de la Corte de Apelaciones, pues advierte que de aprobarse el proyecto los efectos tanto en la salud de las personas como en el entorno podrían ser muy perjudiciales e irreversibles.
“Chile tiene una enorme ventaja comparativa para promover las energías renovables y dejar de promover el carbón como fuente de energía, que es mucho más inestable en cuanto a los precios y produce externalidades en la salud de las personas y también en el medio ambiente”, destacó.
En tanto, el Ministro del Interior, Andrés Chadwick, señaló que en Chile las resoluciones judiciales se respetan “nos parezcan adecuados o no adecuados, gusten o no nos gusten” y que serán el poder judicial y los sistemas medioambientales quienes tendrán que resolver los ajustes necesarios para que el proyecto sea finalmente aprobado.
Mediante una declaración pública, la generadora Endesa Chile indicó que la orden de no innovar no tiene efectos prácticos en el desarrollo de la Central, dado que esta se encuentra aún en fases administrativas. Además, señaló que la resolución judicial “no implica en modo alguno un pronunciamiento sobre el fondo de la cuestión debatida”.
La central cuyo costo total asciende a los 1.400 millones de dólares contempla dos unidades de potencia de al menos 370 mega watts cada una, además de la instalación de un puerto y 5 plantas de tratamiento de aguas servidas. Endesa estima que la decisión de inversión sobre el proyecto se tomará en 2014 y que la planta generadora podría estar en operaciones en 2018.