En el archipiélago de Chiloé, a 1.100 kilómetros al sur de la Región Metropolitana, se reactivaron las protestas ciudadanas críticas del centralismo y del abandono en materia de salud, a causa de la muerte de una mujer y del hijo que llevaba en su vientre, quienes no pudieron ser atendidos en el Hospital de Ancud.

Se trata de Miriam Marcela Ojeda Santana, de 35 años de edad, quien tenía un embarazo de 25 semanas, y falleció con su hijo en gestación el domingo pasado en el Hospital de Puerto Montt a consecuencia de una hemorragia cerebral. El hermano de la fallecida, Roberto Ojeda, criticó que el Servicio de Salud de Chiloé no funcione con autonomía y que se requiera trasladar a los pacientes a Puerto Montt, que está a 100 kilómetros e incluye además el cruce por el Canal de Chacao.

En este sentido, el hermano de la mujer fallecida señaló que “porque hubo un problema de protocolo ahí, donde Puerto Montt da la orden de que se traslade a Castro y Castro rechaza a la paciente devolviéndola hacia Ancud y en Ancud recién para llevarla a Puerto Montt, pero ya el desenlace está claro. Uno tiene que solicitar una ambulancia, se pide desde Chiloé permiso a Puerto Montt para derivarlo a Castro. Eso es absurdo, debería ser autónomo y no depender de Puerto Montt, para nosotros es una tragedia y el tema de negligencia es evidente”.

En respuesta, el director del Hospital de Ancud, el ingeniero comercial Leopoldo Oyanedel, dijo que “no es necesario tener un hospital de alta complejidad en Chiloé porque la cantidad de población no lo amerita, y que tampoco sirve disponer de un helicóptero porque el clima no lo hace viable”. También aclaró que sólo hubo un traslado de la paciente hacia Puerto Montt, y que esto se hizo en una ambulancia con la compañía de una matrona y un médico. “Entiendo que los familiares quieran buscar culpables, pero en este caso se hizo lo que correspondía”, dijo el médico Leopoldo Oyanedel.

En esa línea, el director del Hospital de Ancud detalló que “se realizaron los contactos con el hospital de Puerto Montt y el hospital dijo que llamáramos en 15 minutos porque el jefe de turno tenía que preguntar si habían cupos de camas y Neonatología para la paciente. Se llamó en el intertanto al hospital de Castro y ellos dijeron que correspondía trasladarla al hospital de Puerto Montt, se volvió a llamar a Puerto Montt y el hospital de esa ciudad recibieron a la paciente y se generó el traslado. Se fue en una ambulancia con médico y matrona. La paciente desde el momento que sale del hospital de Ancud su único destino fue el hospital de Puerto Montt”.

Por su parte, la alcaldesa de Ancud, Soledad Moreno, afirmó que “desde el inicio de las manifestaciones hace dos meses y desde la visita del ministro de Salud Jaime Mañalich a la zona (el 29 de mayo pasado), casi no ha habido mejoras en la situación de la salud del archipiélago”. Respecto del caso de la persona fallecida, comentó que “aun cuando al parecer era una situación grave, es evidente que la salud pública en Chiloé es sumamente precaria”.

Por esto, la autoridad de Ancud afirmó que “los antecedentes que tengo de esta joven embarazada que murió en la madrugada del domingo, el director del hospital me comentó que era un caso irreversible de un derrame cerebral. Yo he sido muy clara en hacer sentir también que Ancud está lejos de tener una salud, ni siquiera mediana. Tenemos una emergencia en donde para una radiografía tiene que esperar hasta el otro día, depende del horario que llegue o ser trasladada a Castro para exámenes, para radiografías. Nosotros tenemos una emergencia de salud”.

Las protestas en Chiloé se reactivaron luego de la muerte de esta mujer con su hijo en gestación, las que se suman a otras dos personas que fallecieron en Castro a mediados de mayo. Por esto, las asambleas sociales de Ancud, Castro, Quellón y Dalcahue están organizando un nuevo calendario de movilizaciones para reclamar una “salud digna”.