Trabajadores y usuarios de la salud convocan a paralización nacional

Organizaciones de funcionarios y usuarios ratificaron el llamado a movilización para el próximo 21 y 22 de agosto, para presionar por mejoras en infraestructura, personal especializado y condiciones laborales. Además, llamaron a los candidatos a pronunciarse sobre la crisis del sistema público.

Organizaciones de funcionarios y usuarios ratificaron el llamado a movilización para el próximo 21 y 22 de agosto, para presionar por mejoras en infraestructura, personal especializado y condiciones laborales. Además, llamaron a los candidatos a pronunciarse sobre la crisis del sistema público.

Con un llamado a Paro Social de la Salud, los trabajadores y usuarios convocaron a gremios y ciudadanos a sumarse a la movilización del próximo 21 y 22 de agosto.

La crisis del sistema público de salud, evidenciado en la falta de especialistas, deficiencias en infraestructura y tecnología, además de problemas con el trato hacia los trabajadores, son algunas de las medidas que los convocantes exigen resolver a las autoridades.

Óscar Riveros, presidente nacional de la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats), llamó a que “se instale en el debate el tema de la salud pública para que, dentro de la reforma tributaria, se considere la instalación de un presupuesto mayor. Los trabajadores y los usuarios hacen un llamado a todo Chile a manifestarse y decir que este país quiere una salud pública de calidad, oportuna y gratuita”.

Los pacientes también son parte de este llamado. Así lo enfatizó Rosa Vergara, dirigente de la organización Usuarios de la Salud, quien recalcó la molestia de los usuarios del sistema público de atención médica en nuestro país: “Basta de concesiones. Queremos más médicos y queremos más remedios. No es posible que en las postas estemos en camillas, en una silla con suero, mientras estamos tan enfermos. No es posible que en los policlínicos no tengamos exámenes ni radiografías. La crisis de la salud es tan evidente, que hay que empezar a manifestarse”, afirmó.

En tanto, desde la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) se hace un llamado, en año electoral, a poner en agenda los problemas de salud. Se trata de un punto fundamental para avanzar en el diseño y la mejora del sistema, subrayó Karen Palma, dirigenta de la central en el área: “Pretendemos que se visibilicen todos los conflictos de los trabajadores en este periodo y además emplazamos a los candidatos a la presidencia y al Parlamento a que se pronuncien respecto de qué salud queremos y qué tipo de trabajo queremos. En el servicio de salud tenemos precariedad laboral, inestabilidad y condiciones deficientes para nuestros compañeros”, indicó.

El miércoles 21 y jueves 22 de agosto se iniciará una manifestación en plaza Vicuña Mackenna que avanzará hacia la ex Posta Central, como medida de solidaridad con los trabajadores que permanecieron paralizados por 22 días exigiendo mejoras en el trato hacia los trabajadores.

En otras manifestaciones del área, desde la Confederación Nacional de Funcionarios de Salud Municipalizada (Confusam) emplazaron a los candidatos presidenciales a que den a conocer cuáles serán los lineamientos programáticos en salud.

La reforma sanitaria iniciada durante la administración de Ricardo Lagos ha sido incapaz de satisfacer las aspiraciones de la ciudadanía y, por el contrario, generó “una nueva forma de discriminación en salud, dando paso a una modalidad de subsidio millonario del sistema público a la salud privada”, enfatizó el presidente de la instancia, Esteban Maturana.

Mientras, la Agrupación Nacional de Médicos de Atención Primaria (APS) y el Colegio Médico continúan la campaña nacional para transparentar las falencias que existen en consultorios y Sapus. Dicha iniciativa es parte del proceso de movilizaciones que impulsa la APS con el fin de lograr respuestas de parte del ministerio de Salud.

La semana pasada, el presidente de la entidad, Camilo Bass, junto al órgano colegiado, llegaron hasta la secretaría de Estado a presentar una carta de alerta sobre la precariedad de los consultorios nacionales. De no recibir pronta respuesta, los profesionales médicos no descartan paralizar sus actividades.





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