Se llamaba María Aldunate, pero en la Alemania dominada por el régimen nazi era popularmente conocida como Rosita Serrano. Ahí había llegado en 1936 desde su natal Viña del Mar y ahí se había convertido en una diva: después de tener éxito en un teatro de variedades, alcanzó un estrellato que la llevó a grabar más de un centenar de canciones y más de una decena de películas.

Tuvo la aprobación de Hitler hasta 1943, cuando la ayuda que habría prestado a la resistencia la hizo caer en desgracia. Perdió todos los privilegios de los que gozaba, pasó por Hollywood y África, se casó con un millonario egipcio y volvió a Chile en los ’60. Décadas más tarde, murió en el olvido.

“Rother Mohn”, primer éxito de Rosita Serrano.

Esa es la historia que retrata Rosita, la favorita del Tercer Reich, documental de Pablo Berthelon que se estrena comercialmente este jueves en los cines Alameda y Normandie y en la Cineteca Nacional.

El realizador conocía la historia desde su infancia, pues la protagonista era prima de su abuelo y una tía cercana a su madre, la cantante Carmen Aldunate. “Crecí con esta historia, siempre pensando que estaba un poco exagerada y adornada, como es lo típico. En los 2000, con la llegada de internet, pude buscar y ver que todo era cierto. Investigué y encontré mucho más”, relata. Así es como decidió hacer la película, que le tomó dos años de trabajo.

Rosita Serrano, rostro de Telefunken.

“Yo sabía que era un tema potente. Chile nunca tuvo a un personaje como ella y estamos hablando también de un contexto bien particular y atractivo para mucha gente, como la II Guerra Mundial. Prácticamente es una vida de película, en la que se viven las dos caras de la moneda, el éxito y el fracaso, entonces estaban todos los ingredientes para que a la película le fuera bien. Creo que ha cumplido todas las expectativas y las está superando”, afirma Berthelon.

Esto, porque la cinta se exhibió en el festival de documentales musicales In-Edit y en festivales de Antofagasta y Coquimbo, adonde fue premiado. Ahora viajará al prestigioso Festival de Mar del Plata y al de Trieste (Italia) y también estará en el Festival de Cine Documental de Chiloé (Fedochi) y el de Puerto Varas (Surdocs).

Según Pablo Berthelon, la cinta está cumpliendo así con el propósito inicial: “Rosita fue un personaje importante, la cantante popular más grande que tuvo Chile, o la más famosa, y hoy casi nadie la conoce. Creo que merece un espacio entre los artistas reconocidos, acá en Chile por lo menos. Afuera todavía la conocen, recuerdan y le rinden culto. Las personas que ven la película se sorprenden mucho y siempre surge la misma pregunta: ¿Por qué yo no la conocía, si fue tan grande? Entonces pienso que la película está cumpliendo su rol, que era ponerla en su lugar y en el sitial que merece”, explica.

Mientras el documental se estrena en salas, Pablo Berthelon se encuentra preparando otros dos trabajos: uno sobre la música ancestral de Rapa Nui y otro sobre María Paz Santibáñez, la pianista baleada por un carabinero durante una protesta en 1987.