Variados sonidos, colores y técnicas musicales caracterizan el concierto que la Compañía de Música Contemporánea brindará este miércoles 27 de noviembre, a las 19:30 hrs., en la Sala Isidora Zegers (Compañía 1264, Santiago).

La presentación cerrará la Temporada Oficial de Conciertos del Departamento de Música y Sonología de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile.

El programa comenzará con Tres canciones sobre textos de Dogen Zenji, escrita por Víctor Ortiz entre 2010 y 2011. Según el director Carlos Valenzuela, la obra destaca por su “sencillez” y “transparencia”.

Valenzuela explicó que las dos primeras canciones son “poemas muy breves y bonitos que hacen alusión a ideas sonoras y se mueven con muy pocas notas”. Sin embargo, la tercera canción “es muy violenta y requiere de una gran precisión”.

El director agregó que la pieza demanda mucho virtuosismo del intérprete y “es como si se necesitaran dos pianistas para interpretarla”.

En las dos primeras canciones, la solista Carolina Grammelstoff debe cantar en un registro muy bajo y agudo, emitiendo un sonido apacible, mientras que en la tercera pieza “vienen los forte donde la intérprete canta mucho más arriba pero con mayor carácter. En el fondo, es para desahogarse.

Luego, cinco intérpretes ejecutarán Two surfaces (2013), de Pedro Álvarez, una obra complicada por su estructura rítmica. Carlos Valenzuela consideró que es una especie de “ciclo que se va repitiendo pero nunca lo hace de la misma manera, creando una atmósfera donde pese a haber silencio, siempre se escucha algo de fondo”.

Finalmente, el concierto contempla Sextine cyclus (2000), del francés Marc-Andre Dalbavie, que será interpretada por 12 músicos, entre ellos, la soprano Carolina Grammelstoff. “Lo novedoso es que a pesar de ser una pieza contemporánea, la puede escuchar cualquier persona sin cercanía o conocimiento con la música contemporánea y le va a gustar igual, ya que lo que hace el autor es unir canciones folclóricas europeas con ‘pequeños’ toques contemporáneos”, afirmó Valenzuela.

La Compañía de Música Contemporánea se creó en 2006 con el fin de ejecutar obras de compositores de la segunda mitad del siglo XX, en especial de jóvenes autores chilenos. A fines de 2009 fue incorporada como cuerpo estable del Departamento de Música y Sonología de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, para desarrollar un proyecto de extensión, creación, investigación y docencia.