Cerca de cinco mil chilenos residentes en el extranjero marcaron simbólicamente su preferencia electoral. Desde 96 países se recibieron votos a través de la plataforma votociudadano.cl, proceso que recogió la información entre los días 9 y 15 de diciembre.
Michelle Bachelet fue la carta victoriosa con un 79,9%, es decir 3890 votos, en contraste de Evelyn Matthei que obtuvo un 20,1% correspondiente a 981 sufragios.
Si bien el total de personas disminuyó considerablemente respecto de la primera vuelta presidencial, los organizadores destacaron el sistema que hace posible el voto en el extranjero.
Así lo explicó María Luisa Sepúlveda, presidenta del directorio de Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, y parte del TRICEL:“Nuestra meta no era el número de votos, nuestra meta era probar un sistema que hacía posible votar en el extranjero en la elección presidencial en Chile. En ese sentido, sentimos que se logró bien, nos hubiese encantado que votara más gente, pero entendemos las limitaciones que tenía saber y conocer como era este proceso y como la gente podía ejercer este derecho”.
Rossana Dresdner, directora de Voto Ciudadano recalcó el aporte de la iniciativa en el debate sobre voto en el extranjero.
“Creemos que dado que se ha puesto, afortunadamente, en el centro del debate público el tema de los votos de los chilenos en el exterior, creemos hacer un aporte importante al demostrar la seguridad absoluto de este voto, garantizar un voto limpio y un voto seguro, un voto transparente. Sobre todo, queremos insistir en que no es posible que un derecho político, como es el derecho a votar, no pueda ser ejercido por los chilenos en el exterior”, agregó.
Tomás Barros, director tecnológico del centro INRIA Chile y encargado del aspecto técnico del proceso detalló que el siguiente paso será presentar a las autoridades el sistema implementado.
“Lo primero es que hay que discutir es si vamos a permitir que en Chile la gente vote remotamente o no, más allá de la solución tecnológica que vamos a aplicar. La idea es llevar todos estos datos, todos estos valores, también los casos de la gente que no pudo votar por un problema técnico, también los vamos a llevar a la autoridad en general”, explicó.
Esta segunda versión del voto simbólico, se desarrolló en medio de diversas demandas y recursos de protección contra el Estado chileno, como la presentada ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos presentada por Haz Tu Voto Volar, y los recursos de protección desplegados por los abogados Carmen Hertz e Hiram Villagra durante la semana pasada.
Otro de los escenarios que acompañaron la disputa de la posibilidad de voto en el extranjero fue la aprobación del senado del proyecto de Ley que vendrá a regular el proceso de sufragio, el cual no fue recibido de buena forma por los organizadores de Voto Ciudadano, producto de las importantes diferencias que mantienen con el texto.
Los organizadores del evento, enfatizaron que esta segunda versión prueba un sistema que se adecúa a la situación de los chilenos residentes en el extranjero y, por sobre todo, demuestra que más allá del número de votantes, es una necesidad primaria por derecho que los chilenos puedan ejercer su derecho a sufragio.
