Hoy fue publicado en el Diario Oficial el nuevo reglamento de etiquetado de alimentos, luego de una extensa discusión en el Parlamento que ameritó incluso la intervención de Contraloría para aclarar algunos puntos.
En concreto, la nueva normativa ordena a las empresas etiquetar los productos que traigan altos niveles de azúcares, sodio y grasas saturadas, los cuales tendrán que llevar un rotulado en la cara principal del envase con una advertencia del contenido, en un formato rápidamente comprensible por los consumidores.
Además, productos altos en azúcares y grasas no podrán ser vendidos en establecimientos educacionales, uno de los puntos más celebrados por los expertos.
Precisamente, Isabel Zacarías, nutricionista del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA), destacó los aspectos más relevantes del nuevo reglamento.
La especialista del organismo de nuestra universidad señaló que “hay algunas cosas que me llaman la atención porque quedaron fuera, como las cecinas que no están y que deberían estar con algún mensaje, me parece bien que esté la normativa gráfica con la estandarización del tamaño de la letra, la ubicación en el envase. El tema importante para la implementación de esta ley es el hecho de restringir la venta de alimentos con altos nutrientes críticos al interior de los establecimientos educacionales”.
La experta agregó que de todas formas faltó ampliar la gama de alimentos contenidos en la nueva normativa, por ejemplo, a las hamburguesas y las salchichas, de alto consumo en la población infantil.
Para Tito Pizarro, pediatra y director ejecutivo del Observatorio de la Obesidad, se debe complementar este reglamento con otras iniciativas que vayan en ayuda de los sectores de escasos recursos.
El especialista agregó que una eventual reforma tributaria debe incluir un impuesto a los alimentos altos en grasas y azúcares.
En esa línea, el director del Directorio de la Obesidad indicó que “esta ley y el Reglamento que ahora va a ser publicado es un tremendo avance, pero hay que implementarlo de tal manera que también la industria de alimentos entienda que tiene que bajar sal, azúcar y grasas saturadas y en esa perspectiva también creemos que en la reforma del punto de vista tributario probablemente también falta que hayan impuestos para aquellos alimentos que tienen exceso de sal, azúcar y grasas saturadas”.
Con la publicación en el Diario Oficial, el nuevo reglamento entrará en vigor dentro de 6 meses más, mientras que en un año esta misma medida también será obligatoria para los productos altos en calorías y azúcares. Finalmente en 18 meses será el turno de aquellos alimentos altos en sal.
Respecto de estos plazos se refirió el ministro Jaime Mañalich, quien afirmó que “este nuevo reglamento se pensaba aplicar en enero, pero va a ser un poco más largo. A pesar de que teníamos intención de que su vigencia fuera anticipada, la Contraloría estimó que era ajustado a derecho que pusiéramos como obligación mínima los meses que estamos señalando”.
De acuerdo a datos que maneja el ministerio de Salud, la rotulación para estos productos se aplicará al 90% de los snacks salados y bebidas azucaradas.
El reglamento forma parte de la Ley de Etiquetado Nutricional de los Alimentos y su Publicidad, que apunta principalmente a que la comunidad adopte hábitos saludables.