La Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) realizó una actividad de balance y proyección, pensando en el cierre del ciclo político encabezado por el Presidente Sebastián Piñera y también en el inicio de un nuevo Gobierno, esta vez de la llamada Nueva Mayoría.

La organización sindical recordó la lucha que emprendieron el 2010 en contra del Gobierno de la Alianza, debido al alto número de despidos en el sector público, que según denuncian se acerca a los 10 mil funcionarios.

La más reciente acusación a la actual administración es la proliferación de concursos públicos que nunca se habían hecho en distintas reparticiones del Estado, lo que se interpretó como un amarre de operadores políticos en puestos claves.

Ahora, pensando en el Gobierno que dirigirá Michelle Bachelet, el presidente de la ANEF, Raúl de La Puente, aseguró que se mantendrá la autonomía de la organización, sobre todo en el rol de proteger a los funcionarios públicos.

“Tenemos autonomía y eso significa libertad e independencia del gobierno de turno, cualquiera que sea. Independencia del partido, cualquiera que sea. Nosotros somos una organización sindical que va a cumplir su rol a cabalidad y, por lo tanto, vamos a ejercer todos nuestros derechos. El gobierno, para nosotros, es una contraparte, por lo tanto tendremos que interlocutar con el gobierno”, aseveró.

Según el dirigente, esto se verá expresado no solo en este sentido, sino que además en la movilización social y en la concreción de políticas en favor de los trabajadores.

“Los funcionarios del Registro Civil estuvieron en paro por más de un mes, los funcionarios municipales también alrededor de un mes, las trabajadoras de Integra y nosotros, durante el último reajuste, tuvimos alrededor de diez días de paros y movilizaciones. Por lo tanto el movimiento sindical ha ido mejorando su nivel de movilización y creemos que este año también eso debe seguir ocurriendo y eso es bueno para que las distintas demandas, transformaciones o cambios que hay en el gobierno de Bachelet respecto a los temas laborales se puedan cumplir”, expresó.

La Agrupación aprovechó de dar a conocer un nuevo foco de conflicto en el sector público: Acusaron el desmantelamiento de la Empresa Nacional de Aeronáutica.

Según el presidente de la agrupación de trabajadores de ENAER, Bernardo Tapia, en el primer Gobierno de Michelle Bachelet se iniciaron desvinculaciones que hoy se profundizaron en el área productiva; lo que a su juicio apunta a un intento de privatización.

“Partió justamente en el periodo de la Concertación, con la señora Bachelet, ño peor de estos últimos 150 años de despidos. La empresa alega que hay una reestructuración, la que se ve solamente de la cintura para abajo, porque más del 70% de los ejecutivos de la empresa sigue permaneciendo, de un área que hoy día se aniquiló y en la que el resto de los trabajadores fueron desvinculados. Y hay carreras descendentes, quien fue gerente hoy está de jefe de departamento, con el mismo sueldo de gerente”, afirmó.

Los dirigentes de las organizaciones insistieron también en las principales demandas del sector: Estabilidad en el trabajo, derogación de las leyes antisindicales para el sector público y máxima probidad y mayor manejo político en las nuevas autoridades públicas.