Cinco candidatos compiten por el sillón presidencial en Colombia, con la atención centrada entre Juan Manuel Santos y Oscar Zuluaga. Los tres restantes, el centroizquierdista Enrique Peñalosa; la conservadora Marta Lucía Ramírez; y la denominada candidata de la izquierda Clara López, según las encuestas, mantienen porcentajes cercanos al 10 por ciento, con una población total de 45 millones habitantes, representando al segundo país que tiene mayor densidad de población después de Brasil, en América Latina.
Los analistas coinciden en afirmar que esta campaña presidencial ha estado marcada por lo que han llamado “una guerra sucia”, que ha sido debidamente replicada a través de los medios de comunicación. En tanto, 64 observadores internacionales se encuentran desplegados por todo el territorio, haciendo seguimiento a la tecnología, seguridad electoral y financiamiento de las campañas.
El ex ministro y ex embajador socialista Luis Maira, nombrado por el Gobierno como representante de Chile, en su rol de Acompañante en la Mesa de Diálogo por la Paz entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC , que recientemente logró decretar una tregua, calificó estas elecciones como decisivas para el proceso que lleva adelante ese país.
“No es probable, más bien es totalmente seguro que de que no habrá un vencedor en primera vuelta. El sistema político colombiano exige 50% más uno para que un candidato triunfe en primera vuelta, y en ninguna de las encuestas los candidatos han pasado del 35%, y ese es otro elemento que le da un alto grado de competitividad al proceso electoral “, afirmó Luis Maira.
El investigador del Centro de Estudios para la Igualdad y la Democracia, académico Daniel Giménez, aseguró que está convencido que estas elecciones serán muy similares a las de 2010. En esta ocasión Santos de todas formas tiene una clara ventaja, porque controla todas las herramientas de poder del Estado
Daniel Giménez concluyó que “en términos concretos entonces, el resultado del domingo no debiera ser muy sorpresivo. Va a salir primero José Manuel Santos con una diferencia no muy significativa pero respetable, respecto al segundo lugar que seguramente va a ser Zuluaga, sin embargo, como la derecha va dividida en tres candidatos, es altamente improbable que Santos alcance los votos suficientes para ganar en primera vuelta”.
Por otra parte, Pablo Lacoste del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) de la U. de Santiago, sostuvo que la situación en Colombia es imprevisible.
Lacoste precisó que “un acontecimiento inesperado puede generar un vuelco, no es tan previsible como en Chile, entonces yo creo que hay que estar muy atentos, día a día, hora a hora, ver qué es lo que ocurre porque una decisión, un anuncio o un hecho imprevisto puede generar un cambio. Entonces ahí es mucho más difícil predecir. Hay que ver cómo avanzan esas negociaciones con la guerrilla, vamos a ver qué pasa con las denuncias de los hackers, vamos a ver qué discurso o qué nueva denuncia aparece, es mucho más difícil, así es que yo no me atrevería a decir ningún pronóstico”.
Esta ha sido una carrera presidencial con sorpresas y golpes entre los dos candidatos, con mutuas denuncias, que de acuerdo a los observadores sobrepasa el tono que se acostumbra ver en estas contiendas, con la reciente denuncia de cuatro campesinos asesinados en el municipio de Ipiales por fuerzas militares irregulares, que lleva además el ingrediente de un presidente que se encontraba, como plantea Daniel Giménez, “atrapado por la trampa de la insignificancia de no haber hecho nada histórico”. Por ello habría acelerado el proceso de paz, cuyos efectos en las próximas elecciones es aún incierto.