A la cita acudieron Sara Larraín y María Isabel Manzur de Chile Sustentable e Iván Santandreu de Chile sin transgénicos, quienes sostuvieron esta primera reunión con el titular de Agricultura Carlos Furche, para tratar de avanzar en una agenda de sustentabilidad en la materia.
Entre los temas abordados estuvieron la expansión indiscriminada de los transgénicos en Chile, el Proyecto de Ley de Derechos de Obtentores Vegetales o llamada “Ley Monsanto” y la conservación de las semillas tradicionales de Chile.
Específicamente, los medioambientalistas expresaron su preocupación por la liberación de transgénicos en el valle de Lluta en la región de Arica y Parinacota. Al respecto María Isabel Manzur comentó que “en este lugar se cultiva el maíz de Lluta, un recurso genético único en el mundo, de incalculable valor pues puede crecer en suelos salinos y que podríamos perder por contaminación genética”.
La vocera de la Organización Chile Sustentable, se refirió además a las prioridades que debiese tener la cartera de Agricultura en este tema “hay que catastrar nuestras semillas y conservarlas urgentemente, se están muriendo los agricultores que las están perdiendo”.
Las organizaciones ambientalistas valoraron la disposición del Gobierno a conversar sobre estos temas, oportunidad que les fue negada en la anterior administración.
Al respecto, Iván Santandreu de Chile Sin transgénicos, criticó la postura que adoptó el ministerio durante el periodo de Sebastián Piñera “el avance fue todo lo contrario, ellos le pusieron urgencia e incluso suma urgencia en algún momento a la Ley Monsanto para que estuviera pronto su aprobación”, sostuvo.
En cuanto a la “Ley Monsanto”, Iván Santandreu explicó que “este proyecto de ley crea un gran desequilibrio entre los derechos de los mejoradores y el de los agricultores, pues otorga excesivos beneficios a las semilleras biotecnológicas sobre sus semillas patentadas”.
Los representantes de estas organizaciones expresaron que nuestros país no ha avanzado en la protección de las semillas tradicionales (que se están perdiendo aceleradamente por desuso), ni en reconocer los derechos de los agricultores a tener beneficio por el uso de sus semillas y señalaron al ministro la necesidad de ratificar el Protocolo de Nagoya.
Luego de la reunión se acordó seguir trabajando en una agenda conjunta y ambas organizaciones valoraron la disposición del Ministro de avanzar en los temas planteados. Al finalizar Sara Larraín expresó que “valoramos este primer encuentro con el ministro, pues debíamos conocer su postura para trabajar en estos temas y seguiremos dispuestos a avanzar en ellos”.