Un escándalo local provocó la idea de que Fundación Minera Los Pelambres planeara presentar un proyecto a Corfo para hacerse cargo de los sitios arqueológicos del Valle del Choapa, el que cruza las comunas de Salamanca, Illapel, Los Vilos y Canela, a través de una iniciativa con fines educativos y turísticos, donde se planteaba hacer una “puesta en valor” del patrimonio de la zona.
El problema es que, justamente la Fundación, de propiedad de la familia Luksic ha cometido serios daños al patrimonio, siendo multados por 2,4 millones de dólares por parte de la Superintendencia de Medio Ambiente, a lo que se suman otras irregularidades cometidas en los proyectos de inversión que sostiene la minera.
En esa línea vale recordar que recientemente el Tranque El Mauro, fue declarado obra ruinosa y considerado “un peligro para la vida humana” por la Corte de Apelaciones de Los Vilos, lo que reactivó las movilizaciones sociales en dicha localidad.
Patricio Bustamante diplomado en Conservación del Patrimonio e Investigador en Arqueoastronomía indicó que “En el fondo es para lavar imagen, lamentablemente, porque así se presentan como los buenos”, afirmó y añadió que ellos ya tienen un prontuario enorme de daño patrimonial, porque incluso antes de El Mauro, hicieron un tranque más arriba donde removieron cientos de piezas.
“Están tan mal hechos esos proyectos que no se sabe lo que se sacó, cuantos sitios arqueológicos se removieron. No hay catastro, no hay informes finales”, sostuvo y añadió que sería una aberración que la Fundación que más daño le ha hecho al patrimonio arqueológico de la zonas “sea premiada con un proyecto”.
Por su parte, las comunidades diaguitas manifestaron con fuerza su molestia, cuando han presentado también a diversas organizaciones proyectos para el cuidado de estos sitios, con los que tienen directa vinculación, sin embargo, no han tenido resultados.
Sobre esto se refirió Teresa Olivares, presidenta de la Comunidad indígena Diaguita Taucán quien indicó que “Taucán está en el valle desde el año 1732 en el primer matrimonio de los Taucán en el Valle del Chalinga y hemos tenido que esperar 470 años hasta aquí para poder llamarnos diaguitas chilenos”. Considerando eso añadió que “aparece un señor atropellando todos los senderos, volando el Camino del Inca, cambiando petroglifos y nadie dice nada”.
Los comuneros indicaron que además aquí no se realizó la Consulta que establece el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), lo que fue amparado por los municipios que además habrían apoyado la iniciativa.
Sin embargo, fuentes al interior de distintas municipalidades indicaron que no fue necesario realizar una consulta dado que algunas no dieron su respaldo. Ese fue el caso de Salamaca, desde donde afirmaron que no se firmó la carta de apoyo a la Fundación, ya que existían diferencias con los dirigentes indígenas.
Según señalan desde Corfo, el proyecto no está adjudicado ya que, incluso, la fundación no se presentó al concurso “Bienes públicos para la competitividad regional” de Innova.
Pese a esto las comunidades manifestaron desconfianza y afirmaron estar atentas, asegurando que esto responde a “una nueva estrategia del grupo Luksic”.