La querella criminal fue interpuesta en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, por el abogado de la Defensoría Popular luego que Manuel García fuera puesto en libertad. El vocero de los trabajadores de Transantiago llegó hasta tribunales acompañado por los representantes de los estudiantes secundarios ACES, de la Confech, y también de dirigentes sindicales y pobladores.

Luego de constatar lesiones en la asistencia pública, donde los médicos solo consignaron una pequeña lesión en un tobillo, el dirigente sindical relató que fue duramente golpeado, desmayándose al menos una vez en la comisaría.  Salió en libertad con fuertes dolores de cabeza y en el cuerpo, denunció asimismo que los médicos no le dieron la debida atención y estuvo largas horas en la posta Central sin ser revisado por un especialista.

El presidente del Sindicato “A luchar” y vocero de la coordinadora de trabajadores de Transantiago Manuel Aguilar, enfatiza que le da mucha impotencia la “impunidad con la que se manejan las instituciones”.

“Porque hoy en día lamentablemente estos gobiernos que se dicen de los trabajadores no son gobierno  de los trabajadores sino que a lo único que se han dedicado  ha sido a criminalizar la  lucha social ha criminalizar a los que están de alguna u otra manera tratando de buscar un mejor pasar para los que la están pasando mal y eso se les castiga se les aplica todo el  rigor de la ley y se les persigue y todo lo demás”, destaca Manuel Aguilar.

Por su parte el abogado de la Defensoría Popular, Rodrigo Román, espera tener un buen resultado con esta querella y encontrar a los responsables de la agresión sufrida por el dirigente sindical.

“La policía tengo entendido que tiene rigurosamente registrado cada acción de esas, entonces habrá que investigar nosotros esperamos que la Fiscalía haga lo suyo, tenga el coraje de investigar porque en el fondo lo que hay detrás de esto es que la policía militarizada que existe en Chile está desarrollando una conducta permanente el último tiempo de tratamiento a los luchadores sociales en distintos contextos de la disidencia que implica generalmente una brutalidad policial que significa senda lesiones e inclusos en otros casos constitutivos de delitos más graves como  son los delitos de torturas”

Finalmente, el dirigente sindical recordó las muertes de Rodrigo Cisternas,  Juan Pablo Jiménez y la reciente inmolación de Marco Antonio Cuadra, lamentando sus pérdidas, asegurando que quienes hoy dicen defender a los trabajadores  se “han vuelto contra su pueblo” y cuestiona el nivel de prepotencia y agresividad con que los aparatos policiales responden a las demandas sociales.