Los profesores, trabajadores y estudiantes de la Universidad de Artes y Ciencias Sociales (Arcis), iniciaron el segundo semestre con un nuevo paro para solicitar la intervención del ministerio de Educación en la crisis económica que afecta el futuro de la casa de estudios. La casa de estudios hoy está inmersa en denuncias de salarios impagos por montos que alcanzan a los 600 millones de pesos, corrupción, malos manejos de dineros y, además, ingresos millonarios que nunca se han visto reflejados al interior de la institución, según aseguran los docentes movilizados.

Hace pocos días, a través de un comunicado en la página web oficial de la Universidad, los integrantes de la comunidad se dieron por notificados del cambio en la rectoría. Asumió la sicóloga Elisa Neumann quien, entre otros compromisos, aseguró que avanzará en la estabilización económica, regularizará los flujos financieros y que “la transparencia, probidad, oportuna información y el urgente mejoramiento de la eficiencia” serán los ejes de su gestión. Asimismo, destacó a través de los medios, que la deuda con los trabajadores de la institución alcanzan a los 600 millones de pesos.

El presidente del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Arcis, Eugenio Ulloa, aclaró que toda la información interna se hace en base a rumores, aún no tienen un encuentro con la actual Rectora y las denuncias aparecidas en Ciper, sobre ingresos millonarios para salvar el proyecto educativo nunca han sido transparentados. La grave crisis económica –sostiene- los tiene en la antesala del cierre definitivo.

“Con respecto a las remesas de los 9 millones de dólares iniciales, cuando nosotros hacemos las consultas en forma interna, nos dicen que esos dineros si pasaron por acá, pese a que nosotros no tenemos ningún respaldo o no hay nada visible o tangible que diga lo contrario porque las deudas quedaron igual, porque no hubo un arreglo económico, no hubo un proceso que pudiéramos decir que efectivamente quedáramos saneados y posteriormente, dicen que llegan cuatro millones de dólares más que primero no teníamos antecedentes de estos dineros y menos que se hayan visto reflejados al interior de la universidad”

El dirigente señaló que una medida para salvar la casa de estudios puede estar en la intervención del ministerio de Educación, con quienes ya han sostenido varios encuentros durante las tres paralizaciones que han realizado. En esta oportunidad llevan cerca de tres semanas movilizados, demandando una solución plausible al conflicto. Eugenio Ulloa, también adelantó una futura demanda contra todos quienes resulten responsables por los daños y perjuicios que han tenido que sufrir frente a los salarios impagos y el endeudamiento en que están sumidas sus respectivas familias.

El representante de los llamados “profesores autoconvocados”, Andrés Leiva, agrupación que se descolgó de la Asociación de Académicos porque a su juicio no han sabido representar los intereses de los docentes al interior de la Universidad, explicó el rol que debería tener el ministerio de Educación, para salvar a la U. Arcis.

“Creemos que un gobierno triestramental en una universidad con las características que tiene Arcis, con un ideario progresista puede perfectamente estar dentro de las líneas de trabajo que se enmarcan en los movimientos nacionales de educación pública, gratuita. Nosotros pensamos que nuestro ideario y nuestro proyecto educativo se enmarca perfectamente en lo que es el programa de la Presidenta Michelle Bachelet”

Andrés Leiva aclaró que en el transcurso de este conflicto no han logrado tener un diálogo con las autoridades del establecimiento. Las caras visibles de la Universidad han cambiado continuamente y eso motiva el total desconocimiento de quienes podrían ser hoy los dueños del Arcis y quiénes deberían ser interlocutores válidos, para aunar esfuerzos en esta demanda de salvar el plantel.

En tanto, el vocero de los estudiantes de la casa de estudios, Ricardo Inalef, explicó que esta propuesta es una forma de interpelar al Estado en torno al derecho a la Educación.

“Lo que se hizo es un esfuerzo por interpelar al Estado en torno al derecho a la educación. Sabemos que si bien el Arcis es una institución privada planteamos el derecho a la educación y en ese sentido es el Estado el que se tiene que hacer cargo, por lo tanto, la solicitud que se le hace tiene que ver con un llamado para que se haga parte en esta situación, antes que sea demasiado tarde y se repita el caso de la universidad del Mar”.

Puestas así las cosas, sin contar con una prórroga clara para lograr una acreditación, la Universidad no podrá contar con el Crédito con Aval del Estado (CAE), y comenzará eventualmente el nuevo año académico en 2015 sin la principal vía de financiamiento y sin tener claridad de dónde saldrán los recursos para seguir sosteniendo un proyecto que estuvo durante los últimos 10 años ligado al Partido Comunista.