Un archivo con el cine del exilio llega a la Universidad de Chile
Películas y documentos relacionados con el cine chileno realizado en el exilio donó la especialista Zuzana Pick a la Cineteca de la Universidad de Chile. El material, según los gestores de la entidad, incluye filmes que en nuestro país no se han difundido de manera adecuada.
Diario Uchile
Martes 16 de septiembre 2014 18:55 hrs.
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Cinco cajas con documentos del cine chileno del exilio acaba de recibir la Cineteca de la Universidad de Chile. Se trata de material fílmico, manuscritos, recortes de prensa, fotografías y entrevistas desconocidas hasta ahora en nuestro país, que fueron donados por la investigadora Zuzana Pick.
Luego del golpe militar, realizadores como Miguel Littin, Pedro Chaskel, Gastón Ancelovici, Raúl Ruiz y Patricio Guzmán abandonaron Chile y siguieron trabajando desde diferentes puntos del planeta. Parte de esa labor fue conservada por la Cinemateca Chilena del Exilio, con la cual se vinculó también la académica de la Universidad de Carleton (Canadá), autora de The new latin american cinema: A continental project (1992) y Constructing the image of the Mexican Revolution: Cinema and archive (2010), entre otras publicaciones.
El archivo que entregó la especialista contiene, por ejemplo, largas entrevistas a Patricio Guzmán que no se publicaron en nuestro país e información sobre Recado de Chile, breve documental realizado en forma colectiva y clandestina en 1979 y que registra por primera vez las actividades de los familiares de detenidos desaparecidos.
Luis Horta, director de la Cineteca de la Universidad de Chile, consideró que se trata del archivo más completo y diverso que existe sobre el cine chileno producido desde el exilio: “La Cinemateca Chilena del Exilio se encargó de documentar películas que se realizaban en países tan diversos como Finlandia, Francia, Mozambique, Cuba o la Unión Soviética. Lo que hace Zuzana es documentar qué se estaba haciendo y, gracias a esa investigación, hoy podemos saber que existió un cine chileno del exilio, cuántas películas se hicieron y qué cineastas las realizaron y entender qué temas se estaban abordando. Es una investigación que ella desarrolló durante al menos 30 años”, dijo.
Según el académico del Instituto de la Comunicación e Imagen, el cine que documenta el archivo aborda diferentes temas: desde la resistencia y la denuncia de los crímenes de la dictadura hasta historias más introspectivas, en torno a la adaptación que los chilenos exiliados vivieron en diferentes países.
Se trata, además, de películas que hasta ahora son casi desconocidas en nuestro país: “Han sido un poco incómodas, porque narran un proceso de la historia que en algunos casos se ha tratado de ocultar. Por otro lado, ha habido un poco de desidia, porque no son películas ‘chilenas’ sino producciones de otros países, en Chile nunca han tenido tanta relevancia. Por ejemplo, no son material complementario en los colegios ni se exhiben de manera sistemática en centros culturales o salas de cine. Al no conocerse esas películas, obviamente, no nos conocemos como deberíamos, entonces en la medida que las recopilamos, es posible un reconocimiento como sociedad”, afirmó.
El material ya llegó a Santiago y ahora está siendo catalogado. La intención de la Cineteca de la Universidad de Chile es digitalizarlo y luego albergarlo en una base de datos que se pueda consultar en forma pública, además de utilizarlo para investigaciones, exhibiciones y otras actividades.
Luis Horta, director de la Cineteca de la Universidad de Chile.
Mientras, hasta mediados de noviembre continúa el ciclo Des-exilio del cine chileno, que conmemora 40 años de la fundación de la Cinemateca Chilena del Exilio. Las películas del ciclo se están exhibiendo en el Museo de la Memoria desde el 3 de septiembre y continuarán todos los miércoles a las 19 horas, hasta el 19 de noviembre.
Programación
1 Octubre:
– Chile, no invoco tu nombre en vano
(Colectivo Cine Ojo, 1983, Chile-Francia, 80 minutos)
8 Octubre:
– Memorias de una guerra cotidiana
(Gastón Ancelovici, 1985, Chile-Francia-Canadá, 58 minutos)
– No Olvidar
(Ignacio Agüero, 1982, Chile-Suiza, 30 minutos)
15 Octubre:
– Queridos compañeros
(Pablo de la Barra, 1973-1977, Chile-Venezuela, 125 minutos)
29 Octubre:
– Llueve sobre Santiago
(Helvio Soto, 1975, Francia, 90 minutos)
5 Noviembre:
– Los Ojos como mi papá
(Pedro Chaskel, 1979, Cuba, 35 minutos)
– Presencia Lejana
(Angelina Vázquez, 1982, Finlandia, 68 minutos)
19 Noviembre:
– Chile en Transición
(Gastón Ancelovici y Frank Diamand, 1991, 80 minutos)
Cinco cajas con documentos del cine chileno del exilio acaba de recibir la Cineteca de la Universidad de Chile. Se trata de material fílmico, manuscritos, recortes de prensa, fotografías y entrevistas desconocidas hasta ahora en nuestro país, que fueron donados por la investigadora Zuzana Pick.
Luego del golpe militar, realizadores como Miguel Littin, Pedro Chaskel, Gastón Ancelovici, Raúl Ruiz y Patricio Guzmán abandonaron Chile y siguieron trabajando desde diferentes puntos del planeta. Parte de esa labor fue conservada por la Cinemateca Chilena del Exilio, con la cual se vinculó también la académica de la Universidad de Carleton (Canadá), autora de The new latin american cinema: A continental project (1992) y Constructing the image of the Mexican Revolution: Cinema and archive (2010), entre otras publicaciones.
El archivo que entregó la especialista contiene, por ejemplo, largas entrevistas a Patricio Guzmán que no se publicaron en nuestro país e información sobre Recado de Chile, breve documental realizado en forma colectiva y clandestina en 1979 y que registra por primera vez las actividades de los familiares de detenidos desaparecidos.
Luis Horta, director de la Cineteca de la Universidad de Chile, consideró que se trata del archivo más completo y diverso que existe sobre el cine chileno producido desde el exilio: “La Cinemateca Chilena del Exilio se encargó de documentar películas que se realizaban en países tan diversos como Finlandia, Francia, Mozambique, Cuba o la Unión Soviética. Lo que hace Zuzana es documentar qué se estaba haciendo y, gracias a esa investigación, hoy podemos saber que existió un cine chileno del exilio, cuántas películas se hicieron y qué cineastas las realizaron y entender qué temas se estaban abordando. Es una investigación que ella desarrolló durante al menos 30 años”, dijo.
Según el académico del Instituto de la Comunicación e Imagen, el cine que documenta el archivo aborda diferentes temas: desde la resistencia y la denuncia de los crímenes de la dictadura hasta historias más introspectivas, en torno a la adaptación que los chilenos exiliados vivieron en diferentes países.
Se trata, además, de películas que hasta ahora son casi desconocidas en nuestro país: “Han sido un poco incómodas, porque narran un proceso de la historia que en algunos casos se ha tratado de ocultar. Por otro lado, ha habido un poco de desidia, porque no son películas ‘chilenas’ sino producciones de otros países, en Chile nunca han tenido tanta relevancia. Por ejemplo, no son material complementario en los colegios ni se exhiben de manera sistemática en centros culturales o salas de cine. Al no conocerse esas películas, obviamente, no nos conocemos como deberíamos, entonces en la medida que las recopilamos, es posible un reconocimiento como sociedad”, afirmó.
El material ya llegó a Santiago y ahora está siendo catalogado. La intención de la Cineteca de la Universidad de Chile es digitalizarlo y luego albergarlo en una base de datos que se pueda consultar en forma pública, además de utilizarlo para investigaciones, exhibiciones y otras actividades.
Luis Horta, director de la Cineteca de la Universidad de Chile.
Mientras, hasta mediados de noviembre continúa el ciclo Des-exilio del cine chileno, que conmemora 40 años de la fundación de la Cinemateca Chilena del Exilio. Las películas del ciclo se están exhibiendo en el Museo de la Memoria desde el 3 de septiembre y continuarán todos los miércoles a las 19 horas, hasta el 19 de noviembre.
Programación
1 Octubre:
– Chile, no invoco tu nombre en vano
(Colectivo Cine Ojo, 1983, Chile-Francia, 80 minutos)
8 Octubre:
– Memorias de una guerra cotidiana
(Gastón Ancelovici, 1985, Chile-Francia-Canadá, 58 minutos)
– No Olvidar
(Ignacio Agüero, 1982, Chile-Suiza, 30 minutos)
15 Octubre:
– Queridos compañeros
(Pablo de la Barra, 1973-1977, Chile-Venezuela, 125 minutos)
29 Octubre:
– Llueve sobre Santiago
(Helvio Soto, 1975, Francia, 90 minutos)
5 Noviembre:
– Los Ojos como mi papá
(Pedro Chaskel, 1979, Cuba, 35 minutos)
– Presencia Lejana
(Angelina Vázquez, 1982, Finlandia, 68 minutos)
19 Noviembre:
– Chile en Transición
(Gastón Ancelovici y Frank Diamand, 1991, 80 minutos)
Cinco cajas con documentos del cine chileno del exilio acaba de recibir la Cineteca de la Universidad de Chile. Se trata de material fílmico, manuscritos, recortes de prensa, fotografías y entrevistas desconocidas hasta ahora en nuestro país, que fueron donados por la investigadora Zuzana Pick.
Luego del golpe militar, realizadores como Miguel Littin, Pedro Chaskel, Gastón Ancelovici, Raúl Ruiz y Patricio Guzmán abandonaron Chile y siguieron trabajando desde diferentes puntos del planeta. Parte de esa labor fue conservada por la Cinemateca Chilena del Exilio, con la cual se vinculó también la académica de la Universidad de Carleton (Canadá), autora de The new latin american cinema: A continental project (1992) y Constructing the image of the Mexican Revolution: Cinema and archive (2010), entre otras publicaciones.
El archivo que entregó la especialista contiene, por ejemplo, largas entrevistas a Patricio Guzmán que no se publicaron en nuestro país e información sobre Recado de Chile, breve documental realizado en forma colectiva y clandestina en 1979 y que registra por primera vez las actividades de los familiares de detenidos desaparecidos.
Luis Horta, director de la Cineteca de la Universidad de Chile, consideró que se trata del archivo más completo y diverso que existe sobre el cine chileno producido desde el exilio: “La Cinemateca Chilena del Exilio se encargó de documentar películas que se realizaban en países tan diversos como Finlandia, Francia, Mozambique, Cuba o la Unión Soviética. Lo que hace Zuzana es documentar qué se estaba haciendo y, gracias a esa investigación, hoy podemos saber que existió un cine chileno del exilio, cuántas películas se hicieron y qué cineastas las realizaron y entender qué temas se estaban abordando. Es una investigación que ella desarrolló durante al menos 30 años”, dijo.
Según el académico del Instituto de la Comunicación e Imagen, el cine que documenta el archivo aborda diferentes temas: desde la resistencia y la denuncia de los crímenes de la dictadura hasta historias más introspectivas, en torno a la adaptación que los chilenos exiliados vivieron en diferentes países.
Se trata, además, de películas que hasta ahora son casi desconocidas en nuestro país: “Han sido un poco incómodas, porque narran un proceso de la historia que en algunos casos se ha tratado de ocultar. Por otro lado, ha habido un poco de desidia, porque no son películas ‘chilenas’ sino producciones de otros países, en Chile nunca han tenido tanta relevancia. Por ejemplo, no son material complementario en los colegios ni se exhiben de manera sistemática en centros culturales o salas de cine. Al no conocerse esas películas, obviamente, no nos conocemos como deberíamos, entonces en la medida que las recopilamos, es posible un reconocimiento como sociedad”, afirmó.
El material ya llegó a Santiago y ahora está siendo catalogado. La intención de la Cineteca de la Universidad de Chile es digitalizarlo y luego albergarlo en una base de datos que se pueda consultar en forma pública, además de utilizarlo para investigaciones, exhibiciones y otras actividades.
Luis Horta, director de la Cineteca de la Universidad de Chile.
Mientras, hasta mediados de noviembre continúa el ciclo Des-exilio del cine chileno, que conmemora 40 años de la fundación de la Cinemateca Chilena del Exilio. Las películas del ciclo se están exhibiendo en el Museo de la Memoria desde el 3 de septiembre y continuarán todos los miércoles a las 19 horas, hasta el 19 de noviembre.
Programación
1 Octubre:
– Chile, no invoco tu nombre en vano
(Colectivo Cine Ojo, 1983, Chile-Francia, 80 minutos)
8 Octubre:
– Memorias de una guerra cotidiana
(Gastón Ancelovici, 1985, Chile-Francia-Canadá, 58 minutos)
– No Olvidar
(Ignacio Agüero, 1982, Chile-Suiza, 30 minutos)
15 Octubre:
– Queridos compañeros
(Pablo de la Barra, 1973-1977, Chile-Venezuela, 125 minutos)
29 Octubre:
– Llueve sobre Santiago
(Helvio Soto, 1975, Francia, 90 minutos)
5 Noviembre:
– Los Ojos como mi papá
(Pedro Chaskel, 1979, Cuba, 35 minutos)
– Presencia Lejana
(Angelina Vázquez, 1982, Finlandia, 68 minutos)
