La política, que en este momento entró en la Comisión de Hacienda del Senado, ordenará la institucionalidad y relevará a la JUNJI en su misión de brindar atención educativa a los niños de 0 a 4 años.
Para María Isabel Díaz, principal asesora del Ministerio de Educación en esta materia, los puntos más relevantes de la reforma se relacionan con la institucionalidad.
“Lo que hará este proyecto de ley será crear una Subsecretaría específica de Educación Parvularia, diseñará las políticas de este nivel educativo. Asimismo se desarrollará una Intendencia, dentro de la Superintendencia, con el objetivo de fiscalizar a los establecimientos y orientarlos para que vayan cumpliendo los requerimientos mínimos”, esbozó la educadora de párvulos.
Para José Joaquín Brunner, ex Ministro de Estado, esta medida es completamente realista y necesaria para nuestro país. No obstante, el académico del Centro de Políticas Comparadas de Educación de la Universidad Diego Portales, explica que se tiene que potenciar y no perder de vista la formación técnica y docente de las futuras parvularias.
“Si no existen profesionales bien formados, reconocidos y con el apoyo de la sociedad, lo que reflejan los estudios, es que esos años son perdidos para el desarrollo del lenguaje, de la autoconfianza y de la autorregulación de los niños. No se trata simplemente de construir recintos o de quitarlos. Sino que lo más importante es tener parvularias de nivel altísimo”, garantizó el consultor.
Si bien, Marcela Pardo, experta en primera infancia del Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE), manifiesta que este cambio sienta las bases institucionales y resuelve coherentemente la heterogeneidad de los proveedores en la Educación Parvularia. También expresa que no resolverán los problemas institucionales en su totalidad y define una próxima tarea.
“Hay que resolver, más adelante, los problemas del coeficiente técnico. Esto significa el número de niños por educadoras en el aula. Y no solamente tenemos una suma importante de niños por aula sino que la cantidad de infantes es desigual entre las instituciones que ofrecen este nivel educativo. Pienso que nos quedan varias tareas que abordar y que son posibles a partir de este proyecto, destacó la investigadora del CIAE de la Universidad de Chile.
Según cifras del Ministerio de Educación, en la actualidad el nivel parvulario alcanza una cobertura aproximada al 49,7 por ciento en niños menores de seis años. Este nuevo proyecto no está centrado específicamente en el incremento de la cobertura, delegando esa misión a otro eje de la política de Educación Parvularia. Desde el Mineduc explican que hace más de 10 años se incrementa gradualmente la cobertura tanto en pequeños de 2 a 4 años como en niveles de transición: pre kínder y kínder.
Este Gobierno se está enfocando especialmente en la atención de niños de 0 a 2 años. En donde afirman, tener una deuda. Las objetivos son ambiciosos y se intenta llegar desde un 17 a un 30 por ciento de alcance en salas cunas, cifra cercana a la de los países OCDE.
Sin embargo, esta parte de la reforma solo velará por la nueva institucionalidad educativa. Aunque los expertos señalan que para aumentar la cobertura es necesario implementar condiciones institucionales y que respondan a los requerimientos de cada uno de los establecimientos.