Tres noticiarios distintos. La misma imagen. Un misil que es trasladado. En un noticiario se habla de que Irak sólo destruirá parcialmente su armamento. En un canal vecino, en cambio, se habla sobre la poca voluntad de Irak para eliminar sus armas. La imagen del misil se repite innumerables veces, pero el relato es distinto.
Con este ejemplo la académica María Paz Rebollo, profesora visitante de la Iniciativa Bicentenario, explicó cómo distintos canales de televisión españoles informaron sobre la Guerra de Irak. En este sentido, la profesora indicó que “la guerra de Irak se vendió por medio de los noticiarios de acuerdo a la perspectiva de cada medio. En definitiva se trató de una Guerra que nunca existió, que nunca tuvo un enemigo, que nunca tuvo causas reales, que no tuvo héroes y que nunca tuvo un fin. En otras palabras la Guerra de Irak fue un mito”, indicó la académica.
La charla de la académica se enmarca en su investigación titulada “La representación de la guerra en televisión: la Segunda Guerra de Irak”, trabajo que recopiló un centenar de noticias emitidas por distintos canales de televisión español.
Dentro de sus observaciones se evidenció cómo los distintos canales analizados cubrían, exageraban o atenuaban un mismo hecho.
“En las noticias presentadas por los canales se intentó dramatizar y crear mucha expectativa con el tema de la guerra. Exageraron muchas de las noticias que es lo que necesitan los medios de comunicación para tener audiencia”, indicó Rebollo.
Según la académica, durante el conflicto primaron muchos simbolismos que identificaban a Estados Unidos como un país que salvaba a Irak de su aparente situación de crisis. “Sin embargo, esa crisis nunca existió”, argumentó la académica.
Medios de Comunicación y Mercado
Dentro de las principales conclusiones que identificó Rebollo se encontró la escasez de medios de comunicación. “Actualmente los noticiarios trabajan utilizando agencias, por ende, no tienen la capacidad de comprobar los hechos”, sostuvo.
Además, Rebollo dijo que los noticiarios y al periodismo en general, “le hace falta darse tiempo para investigar”. En este sentido indicó que “la investigación es fundamental dentro del reporteo”.
“Por la rapidez del trabajo en los medios, el periodista está perdiendo el rol de intermediario con la realidad y hay que recuperar el compromiso de los comunicadores con los espectadores”, subrayó.
Por último dijo que actualmente los medios de comunicación trabajan en pro de conseguir audiencia en vez de validar la información, razón por la cual, muchas veces se termina informando de manera errónea.
