Declarado en proceso y bajo arresto quedó Patricio Kellet, ex oficial del Ejército en Valdivia, por presunta dirigencia en torturas ocurridas en 1973 contra militantes del Partido Socialista, en el marco del denominado “Plan Z”.
Entre septiembre y diciembre de 1973, el ex oficial habría perpetrado delitos de tortura en contra del ex intendente de Valdivia, Sandor Arancibia, del ex alcalde de la región, Luis Díaz, de los ex dirigentes de la Juventud Socialista, Joel Asenjo, Víctor Hormazabal y Carlos Bahamondez, además del periodista y ex director de la Radio Camilo Henríquez, Juan Yilorm y del doctor Carlos Villaroel.
Por ello, en marzo de 2014 se inició un proceso en su contra en la Corte de Apelaciones de Valdivia. El abogado querellante Roberto Ávila aseguró que ha quedado acreditada la mentira del llamado “Plan Z”, en el que se acusaba al gobierno de Salvador Allende de haber impuesto un método para llevar a cabo levantamiento armado e imponer la ideología marxista.
Lo que habría quedado demostrado luego de tres años de investigación y de antecedentes y declaraciones que confirman la inexistencia de dicha teoría.
Por su parte, el ex alcalde de Valdivia, Luis Díaz, afirmó que los medios de comunicación también fueron responsables de levantar este tipo de teorías, toda vez que la Dictadura ejerció presiones y control sobre ellos: “Ante la imposibilidad de demostrar hechos factibles para justificar la virtual aniquilación de las cúpulas de los partidos y de las organizaciones políticas de izquierda, se montó una operación de guerra psicológica a través de los medios para cubrir los crímenes”, explicó.
En tanto, el ex dirigente de la Juventud Socialista Joel Asenjo valoró el procesamiento en razón de los largos años de lucha por verdad y justicia que han dado las víctimas de la dictadura y sus cercanos.
Según lo indicó Ávila, el ex oficial del Ejército Patricio Kellet, también investigado por estafas, arriesga de 3 años y 1 día a 5 años de condena.
Asimismo, espera que sean procesados otros implicados en crímenes de lesa humanidad, como el periodista Eduardo Hunter y el dentista Armando Robles, ambos investigados por tortura.