Este sábado comienza el Mundial sub 17 de fútbol, cita planetaria que se desarrollará en nuestro país entre el 17 de octubre y 8 de noviembre en ocho ciudades a lo largo de Chile.

La selección nacional ha vivido un proceso no exento de sobresaltos, luego que a meses del comienzo del campeonato, la ANFP despidiera al técnico argentino Alfredo Grelak, por los malos resultados cosechados en el último sudamericano.

Miguel Ponce asumió el desafío de conducir este combinado realizando una reestructuración casi completa del plantel. Gracias a eso el equipo ha mejorado su nivel, lo que alimenta las expectativas de realizar un buen torneo.

“La historia de esta selección ha pasado por distintos momentos, esos siente jugadores que quedan del proceso anterior, saben lo que pasaron, transmiten lo que pasaron y no lo quieren volver a vivir”, afirmó el técnico.

Leonardo Véliz, quien dirigiera a la selección que obtuvo el tercer lugar en el Mundial de Japón en 1993, espera que estos problemas en la planificación no influyan en el rendimiento del equipo, “hay que esperar y ojalá este quiebre que tuvo el proceso no afecte al grupo porque ha sido muy poco el tiempo que ha tenido Miguel Ponce para trabajar”, advirtió.

Asimismo pidió evitar las comparaciones entre este equipo y otros representativos nacionales: “No los comparen con la roja adulta, no los comparen con el equipo que dirigí en Japón, son procesos distintos, tiempos diferentes y hay que andar con cuidado porque son etapas en que la frustración está a la vuelta de la esquina y puede terminar con la carrera de muchos de estos chicos”, sostuvo.

Chile integra el Grupo A del torneo con Croacia (rival del debut), Nigeria y los Estados Unidos. La organización ha tratado de otorgar a esta Copa un carácter regionalista y por lo mismo el 85 por ciento de los partidos se disputarán fuera de la capital. Las sedes participantes son Concepción, La Serena, Coquimbo, Chillán, Viña del Mar, Talca, Puerto Montt y Santiago.