En 1978 Nelson Schwenke y Marcelo Nilo dieron vida al grupo Schwenke y Nilo. Más tarde, en 1980 nació Santiago del Nuevo Extremo. Por entonces, también un joven Eduardo Peralta desenfundó su guitarra para exponer sus primeras composiciones.

Eran tiempos difíciles donde los espectáculos artísticos eran vigilados y donde las canciones, antes de ser interpretadas, debían pasar el filtro de los militares.

En ese contexto, surgió el Canto Nuevo, un movimiento que sentó sus bases en el Café del Cerro, la revista La Bicicleta y el Sello Alerce.

Hoy el legado de esta corriente es recogido por el documental La sombra del canto, película dirigida por los periodistas Antonio Carrillo y Diego Salazar.

Según Carrillo, La sombra del canto surge como una necesidad de mostrar el movimiento musical que estuvo en Chile a mediados de los ’70 en plena dictadura militar.

“Siempre nos llamaron la atención estos grupos musicales que, medianamente ocultos en dictadura, hacían música. No veíamos espacio, no había conversación en torno a este movimiento del Canto Nuevo. Estaba olvidado, no había vestigios”, comenta.

El documental, que dura cerca de 60 minutos, exhibe a través de los testimonios de los integrantes de Santiago del Nuevo Extremo, Eduardo Peralta y Marcelo Nilo, cómo los músicos sortearon las barreras del régimen para difundir su trabajo.

“Escogimos a Santiago del Nuevo Extremo, Eduardo Peralta y Schwenke y Nilo, porque sentimos que ellos representaban más lo que nosotros queríamos contar. La voz de ellos fue predominante sobre otros artistas. También hicimos un cruce entre estas dos agrupaciones y este músico, porque de alguna forma adoptan caminos similares, pero muy paralelos”, comenta Carrillo.

Además, La sombra del canto propone una revisión sobre cómo cambió la situación de los músicos en los años 90. En este sentido, el documental deja de manifiesto el descontento de los artistas con los gobiernos democráticos.

“¿Qué pasó con el regreso de la democracia? Por ejemplo, tenemos todo un movimiento musical que fue clandestino en dictadura, que fue de resistencia, pero cuando vino la democracia el Canto Nuevo pasó a ser más marginal de lo que fue en dictadura. O sea, son músicos que lucharon por el retorno de la democracia, sin embargo, cuando la democracia llega, ésta no les da la mano, no los toma del brazo, sino que los deja. ¿Dónde están los centros culturales?, ¿dónde están las productoras?  Esa es una pregunta que ellos mismos se hacen”, explica Carrillo.

“Hoy no vemos políticas culturales. Se discuten los porcentajes de difusión de música chilena, o sea, algo que ni siquiera debería discutirse, y la industria del disco está prácticamente muerta y si nosotros vemos el panorama actual, todo está extranjerizado. No hay políticas que sostengan esto. No vemos un paralelo del Sello Alerce que esté sacando música local”, agrega el realizador.

La Sombra del canto se estrenará el próximo jueves 13 de octubre a las 21 horas en el marco del Festival de Cine de Valdivia. Posteriormente, será exhibido en diversos festivales para luego ser publicado de manera gratuita en Internet.

“Este es el inicio de un largo recorrido que va a tener el documental. Luego trataremos de sacarlo a Latinoamérica. Después, por un compromiso que hicimos con los músicos, el material va a circular por centros educativos. Es decir, este es un documental público, para la gente”, recalca Carrillo.

Más información en La Sombra del canto.