En un 6,6 por ciento subirá la tarifa para circular en autopistas este 2017. Una proyección que se construye con el IPC de diciembre del año anterior hasta noviembre del actual y que en 2016 tuvo un incremento de 7,4 por ciento.
Al respecto, el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, descartó frenar el alza de los precios del Tag en el caso de Santiago, y de los peajes en las carreteras para el próximo año.
Según explicó el secretario de Estado, las compensaciones que el Estado tendría que pagar a las sociedades concesionarias son muy caras, y que hoy día “no hay espacio presupuestario para aquello”.
En conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, el presidente de la Fundación Defendamos la Ciudad, Patricio Herman, indicó que el aumento en los cobros de las autopistas es una situación irrevocable y calificó como “un escándalo” los montos de estas alzas.
“Lamentablemente es una situación irrevocable. La verdad de las cosas es que los distintos gobiernos que firmaron contratos con los concesionarios se bajaron los pantalones dándoles privilegios solamente a los ejecutores de las autopistas. El hecho de que anualmente se reajuste en forma automática el 3,5 por ciento aparte del IPC es una brutalidad, eso es un escándalo. En ningún país civilizado se permitiría una situación así, pero en Chile sí”.
Patricio Herman apuntó además a las responsabilidades políticas en el otorgamiento de estas concesiones. Junto con ello, cuestionó la redacción de los contratos, asegurando que éstos sólo beneficiaron a los inversionistas en desmedro de los usuarios.
“Los que estuvieron a cargo del ministerio de Obras Públicas desde el año 1994 en adelante. Todos los ministros de Obras Públicas fueron los que promovieron la ejecución de autopistas concesionadas, lo cual no es malo. Pero lo que nos molesta sobre manera es que los términos de la concesión privilegien los intereses de los inversionistas y no de los usuarios (…) todos los contratos fueron redactados como traje a la medida de las personas jurídicas que pusieron el billete”
El presidente de Defendamos la Ciudad indicó que no se visualizan mejoras en los servicios y recordó que el Estado se comprometió por contrato a garantizarles a los inversionistas “flujos mínimos” es decir, si no hay cierta cantidad de vehículos a las autopistas, el Estado paga ese suplemento.