La lista de Jacqueline van Rysselberghe se impuso en las elecciones internas de la UDI con 62,4% de los votos. En el último balance se confirmó que 6 mil 990 militantes emitieron su sufragio, de un padrón de 72 mil.
Durante la jornada, el sistema electrónico de votación establecido por el partido presentó fallas lo que obligó a suspender por unas horas el proceso. Este hecho motivó a que se extendiera el periodo para votar en una hora.
El presidente de la UDI, Hernán Larraín destacó la inclusión del voto electrónico y minimizó los problemas en su implementación “para hacer procesos nuevos que generen hábitos hay que asumir riesgos. Estoy seguro que le proceso de modernización de nuestro partido es una señal de vanguardia que debe ser imitada”, señaló.
El senador hizo un llamado a la nueva directiva a mantener este tipo de sistema “esperamos que la nueva directiva sienta que tiene no solamente la legitimidad de una buena votación sino que sea la iniciadora de un proceso que ponga a la UDI a la vanguardia de la modernización de la política en Chile”.
Pese a la implementación del voto electrónico la convocatoria a las elecciones estuvo bastante baja, esto porque de un universo de 72 mil militantes, solo fueron a votar cerca de 5 mil. La directiva ganadora asumirá el 7 de enero del próximo año.
Manuel Salazar: “Los Coroneles seguirán mandando”
Como un partido formado bajo el alero de la dictadura calificó a la UDI el periodista Manuel Salazar, autor del libro “Guzmán, quién, cómo, por qué”, basado en la vida del fallecido líder gremialista.
Al respecto Salazar agregó que “posee además una corriente ultra católica que proviene de los sectores más reaccionarios de la iglesia católica chilena y que en un principio se opuso a reformas como la agraria”.
Asimismo agregó que “siempre han defendido los principios que dieron forma a la dictadura y que forma parte de ese 30 por ciento que siempre ha votado por la derecha más conservadora, nostálgica de Pinochet”.
El periodista reconoce que desde la presidencia de Pablo Longueira, a mediados de los años 90, ha comenzado un proceso de apertura hacia los sectores más populares, ganando un espacio importante dentro de la política chilena .
Respecto de quienes ejercen el liderazgo al interior de la UDI, independiente del resultado de la elección interna, el peso de los “Coroneles” sigue siendo preponderante.
Sobre la relación que ha tenido con el empresariado chileno, Salazar afirma que es una relación intrínseca e imperecedera “ellos pertenecen a las mismas familias que controlan a los principales grupos económicos del país y las principales estructuras de la política chilena”, señaló.
El nivel de influencia que alcanza la UDI dentro de los sectores de mayor poder adquisitivo del país, explican la excesiva cobertura mediática de un proceso eleccionario que contó con una participación menor a nivel nacional de las 10 mil personas.