Con un raiting semanal que promedió los 26 puntos, el director del Festival de Viña del Mar, Álex Hernández, se mostró satisfecho por el resultado de la edición número 58 del evento musical: “El festival cumplió las expectativas mucho más allá de lo que estábamos esperando”, dijo en la conferencia de prensa que dio junto a los animadores del certamen.
En la reunión con la prensa, Hernández tuvo que explicar por qué no se había accedido a extender la presentación de la chilena Mon Laferte, única de las artistas que logró hacer despertar al “monstruo” que exigía se le entregara la gaviota de platino durante su actuación: “En ese momento no habían más temas ensayados y seguimos con la pauta. Lamentablemente el público no lo entendió así y en ese momento comenzaron las pifias”.
Laferte emocionó a los asistentes a la Quinta Vergara, mostrando las cartas que coronan como la chilena con mayor proyección internacional del momento. Su calidad vocal y cercanía con el público hicieron que prontamente la galería comenzara a pedir los premios para la artista.
Antes, el colombiano J Balvin había hecho bailar a los presentes, Buena puesta en escena, que incluyó cambió de vestuario durante la actuación; mejor calidad vocal que su coterráneo Maluma y un divertido show con varios hits sirvieron para revalidar el género del reggaetón en el Festival de Viña.