La marcha por la ciencia, organizada de forma internacional, tuvo su versión en Chile. Un centenar de investigadores doctorales, postdoctorales, profesores e investigadores de todas las áreas del conocimiento se reunieron a las 14:30 horas frente al Museo de Bellas Artes, para emplazar a las autoridades a comenzar el trámite legislativo para crear un Ministerio de Ciencia y Tecnología.
Las demandas de los investigadores chilenos son multidimensionales, así lo explica Mauricio Sáez Venegas, director de ANIP, organización colaborativa que reúne a los estudiantes de postgrado con el objetivo de hacer un puente entre el conocimiento relevante que se genera en las investigaciones con las políticas públicas del país.
El director de ANIP puntualizó en las falencias que tiene hoy el desarrollo científico en Chile por la falta de una institucionalidad que maximice esta labor. “Los fondos públicos no están dando abasto frente al crecimiento de la comunidad científica, no se ha estimulado que la ciencia tenga un impacto real en la sociedad en su día a día”.
“Por otra parte, esta la precarización de los investigadores jóvenes, la falta de oportunidades de encontrar un trabajo definitivo una vez que hayan terminado su doctorado o postdoctorado. Hay una muy baja inversión del producto interno bruto para desarrollo científico. Esto es algo que nos retrasa enormemente como país”.
Por más de una década, la inversión en ciencia de nuestro país ha sido de alrededor de un 0,35 por ciento del Producto Interno Bruto, lo que mantiene a este campo de desarrollo en un estancamiento, que si bien es cierto, ha abierto nuevas plazas para estudiar en Chile y en el extranjero, los financiamientos y centros de investigación del estado son aún escasos.
Martín Pérez es investigador en ciencia, tecnología y sociedad y parte del comité organizador de la Science March, la iniciativa que nació en Estados Unidos con el objetivo de manifestarse en contra de la constante invisivilización de temáticas como el cambio climático por parte del presidente de dicho país.
Pérez es docente de la Universidad de Chile y plantea que: “falta una relación entre las políticas públicas y la ciencia, esta marcha reivindica esa relación, como también el rol que el estado tiene que tener con la ciencia. El proyecto de ministerio de ciencia y tecnología tiene la labor de darle gobernanza al conocimiento en Chile y ante eso esperamos que el gobierno le ponga urgencia a al proyecto que crea esa institucionalidad para que sea implementado en el próximo gobierno. La política de ciencia y tecnología es una necesidad real que en muchos años no ha sido resuelta y que tiene hoy a la ciencia en una crisis tanto en su financiamiento como en su gobernanza”.
En nuestro país se organizaron marchas en ciudades como Antofagasta, La Serena, Valparaíso, Santiago, Concepción, Valdivia y Punta Arenas. Así también en México y Estados Unidos.
Este movimiento se ha internacionalizado, ya que cada vez son más los estudiantes chilenos que eligen perfeccionarse en el extranjero, al igual que investigadores extranjeros que en nuestro país encuentran un campo enriquecedor para el desarrollo de investigaciones en el campo de la Astronomía, astrofísica, biología, ciencias sociales entre otras áreas en que Chile cada vez se está destacando más.