El expresidente del Partido Socialista, Osvaldo Andrade, sacó la voz para hacer una apología de cómo se gestionó el patrimonio que recibió su colectividad por los bienes confiscados en dictadura. A su juicio, la controversia abrió un debate ético político que el partido estaba eludiendo: “El cuestionamiento es si el PS está en condiciones de operar en el mercado financiero con sus recursos. Sobre todo cuando tiene una visión de política ideológica de ruptura de sistema”, consignó a La Tercera.

Asimismo, el diputado confirmó que todos”todos los socialistas sabíamos que nuestros recursos estaban en el mercado financiero. Lo que no sabíamos era en qué empresas estaban”.  Eso, con el objetivo de evitar eventuales conflictos de interés que pudieran existir, según señala.

En el plano de las campañas, Andrade reconoció que los recursos de financiamiento eran solicitados a la comisión de patrimonio, incluso los $1.100 millones que donó el partido para financiar la campaña de Michelle Bachelet: “Hicimos liquidez e hicimos un aporte desde la comisión de patrimonio a la Presidenta. Esos $1.100 millones se los devolvimos a la comisión, esta vez con la devolución del Servel”.

El exmandamás de la tienda socialista aprovechó de dedicar algunas palabras para el futuro de su coalición. El parlamentario fue lapidario a la hora de referirse al devenir de la Nueva Mayoría: “Se terminó la Nueva Mayoría. Si la DC nos dijo hace tiempo que la NM se terminaba con el gobierno de Bachelet! Ellos han dicho además que quieren otra cosa, de centroizquierda, sí, pero otra cosa. ¿Cómo va a continuar una coalición donde una de sus partes ya dijo que se acabó? No caigamos en el voluntarismo de la nostalgia”, sentenció.