La Justicia Militar de Coyhaique condenó a ocho años de presidio efectivo a Víctor Follert, Teniente Coronel de Carabineros responsable de las graves lesiones provocadas a Teófilo Haro, durante el Movimiento Social de Aysén, el año 2012.

El abogado del dirigente, Cristian Cruz, en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, relató que el 17 de febrero de ese año que Follert manipuló una escopeta antidisturbios, disparando en el pecho y en el rostro de la víctima. Esto provocó que Teófilo Haro perdiera uno de sus ojos y experimentara daños en el nervio de su retina izquierda por lo que, actualmente, solo cuenta con un 40 por ciento de visión.

A seis años del hecho y con un daño irreparable, Cruz explicó que la demora en dar un castigo efectivo se dio porque en un comienzo el Ministerio Público se manifestó contrario a investigar el caso.

“Desde un primer momento quedó clara la responsabilidad del personal policial. Con relativa rapidez se supo que fue este teniente coronel de Carabineros quien disparó a Teófilo Haro. En segundo lugar, por la cooperación a lo menos cuestionable que ha tenido y tiene el alto mando de Carabineros de Chile respecto de Follert. Lo que quiero decir es que, tratándose de un delito, Carabineros se ha alejado de su deber de colaborar con la Justicia y más bien ha ayudado a Follert, prestando asesoría jurídica, dilatando el que podamos avanzar, obstaculizando e incluso sabemos que no pocos oficiales de Carabineros fueron presionados para incriminar a unos de sus pares y así exculpar a este oficial que iba camino al alto mando de la policía uniformada”, recalcó el jurista.

El abogado de Haro y otros dirigentes de Aysén y Coyhaique, no pierde la esperanza en la postura que pueda tener Carabineros a corto plazo, la que esperan, sea de arrepentimiento por parte del General Hermes Soto, pues aseguró que su llegada al alto mando “democratiza a Carabineros”.

“Hoy Carabineros puede mirar de frente a la comunidad de Aysén, pedir disculpas. Estoy seguro que la comunidad lo va a aceptar, porque esto no puede quedar en el olvido. Pero aquí hubo una operación institucional que provocó este crimen, que durante todos estos años ha permitido la impunidad y que ha dado protección más bien al victimario, no así a la víctima y a los suyos”, declaró el abogado.