La Academia Sueca, que otorga los Premios Nobel de Literatura, entró en una aguda crisis luego de que cinco académicos dejaran su puesto en la institución producto de una denuncia de abusos sexuales.

Con esta baja,  el organismo pierde el quórum que requiere para otorgar los galardones. Actualmente, la Academia sólo cuenta con once asientos ocupados (hace algunos años atrás otras dos personas abandonaron su cargo).

El problema surge porque estos puestos son vitalicios. Frente a ello, el Rey Carlos Gustavo anunció que se efectuarán una serie de modificaciones al interior del organismo con el fin de asegurar el funcionamiento de la institución.

“Tengo la intención de modificar los estatutos de la Academia sueca para que quede claro que es posible abandonarla a petición propia (…). Es un punto de partida que se da por supuesto en el derecho sueco e internacional que quienes no quieran ser miembros de una asociación tengan la posibilidad de renunciar. Eso debe valer también para la Academia Sueca”, afirmó.

La reforma implicará además, que los miembros de la Academia deberán dejar su puesto siempre y cuando no participen en las actividades de la entidad durante dos años.

La primera etapa de esta crisis, fue la denuncia de acoso sexual contra el dramaturgo francés Jean-Claude Arnault, estrechamente vinculado a la Academia Sueca. La siguiente fueron los señalamientos que se habían filtrado los nombres de algunos ganadores de Nobel.