Este domingo 22 de abril la Coordinadora No+AFP convocó a la primera marcha nacional en este nuevo período presidencial de Sebastián Piñera contra el sistema de pensiones. La previa ha estado marcada por menor cobertura mediática de los medios de comunicación tradicionales, acorde a las palabras de una de las voceras del movimiento, Carolina Espinoza. La dirigente habló con Radio y Diario Universidad de Chile y adelantó lo que se viene este año.
¿Por qué la marcha ahora?
Realizamos un congreso en enero y resolvimos seguir trabajando en una cruzada por capacitar y empoderar a la ciudadanía respecto del nuevo sistema previsional que queremos. Nuestro movimiento está inquieto y está planteando qué hacemos. Es posible tener un nuevo sistema previsional más allá de las falacias que dicen los dueños de las AFP, que dicen que los sistemas de reparto están quebrados. Nuestra propuesta no ha podido ser destruida, y la queremos poner en la conciencia de todos los habitantes de nuestro territorio. En la medida que estemos unidos podremos recuperar la dignidad para nuestros viejos y viejas. En ese congreso resolvimos trabajar en torno a lo que hoy denominamos iniciativa popular de ley, que es una estrategia para empoderar y hacer agitación y sumar voluntades. Lo adoptamos como una forma de seguir trabajando. Pero no basta con eso. Sabemos que este tema hay que ponerlo con la fuerza de la movilización. Así le dimos el vamos a la primera marcha, con este gobierno que tiene un sello marcadamente contrario a los derechos sociales.
¿El gobierno los llamó a conversar?
Hablamos con el ministro del Trabajo y la verdad es que uno ve la misma tónica del gobierno anterior, donde se escucha, pero no hay una mirada muy concreta. No tenemos certeza de cuándo vendría esta iniciativa legal para reformar las AFP, en el marco del actual sistema. El gobierno reconoce que es un gran problema que tenemos en el país, a excepción de las Fuerzas Armadas y de Orden que dan pensiones por sobre el millón de pesos en promedio.
¿Cómo manejan el desánimo de la gente en estas transformaciones a largo plazo?
No tenemos derecho a bajar los brazos. Todo lo que tenemos los trabajadores en la historia de la humanidad ha sido conquistado con luchas. Nosotros llevamos unas marchas y no ha sido suficiente. Hemos avanzado, y eso hay que considerarlo, pero hay que salir adelante. Tenemos que ser capaces como pueblo de empoderarnos y seguir en la lucha con esta y otras movilizaciones que nos permitan alcanzar la dignidad para nuestros viejos y viejas. Esto no se va a resolver sin eliminar las AFP y terminar con este negociado.
¿Hay que reemplazar el sistema por otro?
Cualquier medida puede mejorar en un margen las pensiones, pero es evidente que la raíz está en que los únicos que se benefician con las AFP son sus dueños. Es un sistema que no está siendo efectivo para lo que fue creado, todo lo demás es challa. Son más o menos las mismas cosas, con matices. No tenemos claro en qué momento este gobierno va a lanzar su propuesta de reforma. Sí tenemos mucho susto. Nos preocupa que no encontremos un parlamento ordenado, tal como ha pasado los últimos días. Tanto el anterior gobierno como este implementa solo medidas de reforma dentro del sistema, y así seguirá sometido a un poder económico que no quiere que este negocio se le quite de sus manos.
¿Cómo ha sido el proceso de acumulación de energías?
El domingo está a la vuelta de la esquina y estamos preocupados porque no hemos tenido la cobertura de antaño. El año pasado y el 2016 tuvimos mucha difusión, incluso en los medios más tradicionales. En esta ocasión ha sido el boca a boca, los espacios de redes de los propios sindicatos que conformamos la Coordinadora No+AFP, y sabemos que aquí va a haber una resistencia en contra de nuestras demandas, por lo que llamamos a toda la gente a que se sume. Hay movilizaciones y marchas desde Arica a Magallanes. Acá en Santiago nos vamos a congregar este domingo en la Plaza Italia a las 11 de la mañana. Es importante que cada uno se sienta responsable de esta causa. Algunos militamos con más fuerza, dedicamos más tiempo, pero esto no depende de unos pocos. El poder difundirlo con los vecinos, familiares, compañeros de trabajo, para que este domingo salgamos a la calle.