Finalmente, ETA pidió perdón por el daño causado en su trayectoria armada. El grupo separatista reconoció en un comunicado que el pueblo vasco ha padecido mucho y ha tenido un sufrimiento desmedido. ETA asegura que ha provocado graves daños que no tienen vuelta atrás y reconoce su responsabilidad en el dolor causado a víctimas y familiares.
No obstante, se trata de un arrepentimiento selectivo ya que la organización separatista deja claro que su perdón va dirigido a los ciudadanos sin responsabilidad alguna en el conflicto vasco.
Con este gesto, ETA modifica su tradicional discurso, en el que no mostraba arrepentimiento alguno por los atentados que causaron centenares de víctimas civiles durante la dictadura franquista, pero también durante la etapa democrática.
El grupo que luchó por la independencia del País Vasco pretende lograr una amnistía para aquellos militantes que no están involucrados directamente en acciones terroristas. También reclama el acercamiento de los presos de ETA a cárceles más cercanas a sus lugares de origen.
El anuncio se produce como parte del proceso de disolución emprendido de forma unilateral por el grupo separatista vasco en 2011.
En este contexto de retirada, ETA podría anunciar su disolución definitiva el primer fin de semana de mayo, después de que hace un año, iniciara un desarme que fue acogido por el gobierno español con frialdad y escepticismo.