A una semana de la controversial visita del presidente Sebastián Piñera a la Araucanía, donde presentó el “Comando Jungla” para combatir lo que ha sido calificado como terrorismo en la Araucanía, Huenchumilla se inclina por una medida bastante más amigable, pues busca el reconocimiento de los derechos de los pueblos originarios en Chile.
Según informó La Tercera, el proyecto plantea que la ley proteja las tierras indígenas y establezca un sistema para la restitución de estas. Por otro lado, busca garantizar la autonomía territorial y funcional para temas internos de los pueblos y, a la vez, derechos colectivos para ejercer poder dentro del Estado.
Jorge Weque, werkén del Parlamento Mapuche Koz Koz, aseguró que la iniciativa es muy positiva. Manifestó estar agradecido de que el senador Huenchumilla abra espacios para que se reconozca más a los pueblos originarios, pero también manifestó que hace falta mucho más que una reforma para solucionar el problema de fondo.
Por esto, afirmó que han buscado influir en que se haga un cambio constitucional a través de una asamblea constituyente para así tener una modificación completa, ya que lo que se tiene hasta ahora ha sido bajo un margen completamente dictatorial.
Además, señaló que para lograr una propuesta adecuada en este ámbito, es necesario incluir en la discusión a organizaciones de pueblos originarios, pues han reclamado durante años el reconocimiento de sus derechos y una propuesta de este tipo sin su consideración puede “sentirse de golpe y porrazo”.
El representante mapuche también indicó que las amenazas de militarización que se han visto durante los últimos días en la Araucanía demuestran que aún queda mucho por avanzar, “pues bajo la violencia, todo lo que se pueda reglamentar en el Congreso no se ajusta a lo que pasa”.
Una de las propuestas más importantes es establecer una jurisdicción indígena, en materia civil y penal, que tenga relación con los tribunales ordinarios de justicia. Esto se determinará a través de una ley que “determinará sus alcances y los límites de competencia, las formas de reconocimiento de las entidades que la ejercerán y los principios comunes de sus procedimientos”.
En el rotativo referenciado se señaló que el senador Huenchumilla afirmó que su proyecto se basa en los aspectos políticos que aprendió de Colombia, donde la situación con los pueblos originarios se resolvió de una manera política muy notable.
Rodrigo Curipán, vocero del Lof Rankilko, comentó que si bien es un proyecto que podría mejorar las relaciones entre el Gobierno y el pueblo mapuche, primero se debe ver su viabilidad y la voluntad política, pues los lineamientos planteados “son completamente contrarios a los que plantea el gobierno actual”.
Curipán agregó que “la situación de vulnerabilidad que se está generando con la forma de pensar de quienes están gobernando hoy día, hace difícil la relación con los mapuches, pero aun así se debe trabajar en este tipo de propuestas que podrían mejorar los tratos”.
Por su parte, la diputada socialista Emilia Nuyado aseguró que la propuesta es mucho más de lo que diversos gobiernos han hecho hasta ahora, por lo que destacó que se incluyan elementos que garanticen derechos.
“Un reconocimiento donde se incorpora la plurinacionalidad, la restitución de las tierras, la libre determinación, obviamente que es importante en el avance que se pueda tener en reconocimiento de derechos de pueblos indígenas”. Además, destacó la idea de una jurisdicción indígena, pues está podría evitar problemas judiciales como los que hoy enfrentan muchos mapuches.
Si bien la parlamentaria indicó que algunos ejes deben ser explicados más a fondo, como el caso de la ley de reparación y, por lo tanto, se debe evaluar el proyecto, la iniciativa “viene a profundizar” el tema de derechos indígenas que hasta ahora no se ha solucionado por parte del ejecutivo.
La iniciativa elaborada por el ex intendente de la Araucanía, cuenta con el apoyo de otros senadores de oposición como Yasna Provoste, Jaime Quintana, Alfonso de Urresti y Juan Ignacio Latorre, y durante las próximas semanas debería ser discutido en el Senado.