Los gravámenes que bajan son principalmente los dirigidos a las compañías más grandes, aquellas que concentran el capital, y lo que sube es la recaudación del IVA, a través de la boleta electrónica. De esta forma resumió el economista y profesor de la Universidad de Chile, Nicolás Grau, la reciente reforma anunciada por el Mandatario Sebastián Piñera.
Al respecto manifestó que el comprobante electrónico será la herramienta que generará los mayores ingresos al Estado, esto porque su aplicación permitiría reducir la evasión tributaria, a través del aumento del monto de las ventas declaradas por parte de las micro y pequeñas empresas.
Sin embargo, para Nicolás Grau, el proyecto del Ejecutivo está lejos de analizar e integrar a la palabra desigualdad, pese a que en las economías más desarrolladas del mundo los cambios impositivos se utilizan para estrechar la brecha entre los más ricos y los más pobres.
“El sistema tributario tiene un rol de igualar los ingresos de los habitantes, a través de los impuestos progresivos, no solo para impulsar mejoras en obras públicas, sino que igualar también los ingresos económicos de la población”, afirmó.
El también investigador del Centro de Estudios para el Conflicto y la Cohesión Social (Coes), argumentó que los países de la OCDE tienen un Estado más grande que el nuestro, recaudan más del 30 por ciento del PIB, mientras Chile sólo tiene el 20 por ciento.
“Entonces si Chile quisiera imitar a las naciones desarrolladas, que dice querer igualar en esta materia, lo que tendría que hacer es aumentar progresivamente los impuestos, y que estos incrementos sean desde los sectores de más altos ingresos. Esta contrarreforma, de acuerdo a lo que dice el gobierno, no mueve lo primero, porque no recauda más y por el lado de la progresividad se mueve en dirección opuesta, porque lo que está haciendo es financiar una reducción de gravámenes de los que ganan más, subiendo el IVA a las demás personas”, subrayó.
El economista Nicolás Grau criticó la poca transparencia del Ejecutivo al utilizar la modificación como marketing, manipulando reiteradamente la palabra Pymes, y no explicándola, a través del debate de hechos.
Precisó que el problema más serio de Chile, y en general de toda Latinoamérica, es la alta concentración de poder económico, sin embargo, para el experto, acá se está apostando a la “política del chorreo”, y no tomando en cuenta que los beneficiados pueden tomar sus millonarias ganancias y colocarlas en paraísos fiscales, engañando el espíritu de la ley.
Grau comparó además la reforma tributaria del gobierno anterior con la denominada contrarreforma del actual mandato.
“Lo que se hizo para incrementar los gravámenes a los más grandes fue desintegrar parcialmente el sistema, es decir, un tercio de los impuestos que pagan realmente las sociedades anónimas nunca se devolvieron, no se utilizaron como crédito, como es el caso del diez por ciento que paga la mayoría de la gente. Lo que hace este gobierno es disminuir las tributaciones, a través del sistema integrado, incluso en menor medida de lo que proponía la reforma de Michelle Bachelet”, argumentó.
El profesor del Departamento de Economía de nuestra casa de estudios, agregó que otra de las diferencias de la reforma anterior es el fin a la norma general antielusión, donde se había promulgado un reglamento amplio para evitar que las grandes empresas buscarán resquicios para pagar menos cargas. Ahora, precisó, el Servicio de Impuesto Internos (SII) tendrá que detalladamente exponer las reglas del juego para que las compañías más acaudaladas eviten o inventen nuevas formas para no pagar gravámenes.
Finalmente, el experto realizó un llamado a la ciudadanía para que ellos mismos comparen y analicen los grandes cambios de la modificación. Por ejemplo, indicó, comparar cuando van a ganar las Pymes en reducción de tributaciones y cuanto captarán las grandes empresas.