El senador Guido Girardi (PPD) pidió catastrar y hacer un seguimiento a todas las personas que estuvieron cerca del incendio ocurrido el pasado jueves en un sitio de acopio de neumáticos y desechos, en Rinconada de Maipú.
En compañía del toxicólogo Andrei Tchernitchin, el parlamentario advirtió sobre el “grave peligro” que corren los vecinos y bomberos que estuvieron expuestos al humo del siniestro.
Según el especialista, es recomendable que menores de edad, mujeres embarazadas y personas de la tercera edad “salgan de la zona hasta que el material precipite y se haga un buen aseo en los hogares”.
“Los neumáticos están hechos de un polímero artificial con muchas propiedades del caucho, pero como todo plástico, tiene abundantes moléculas de cloro. Cuando combustiona, interactúa con la materia orgánica y produce dioxinas e hidrocarburos policíclicos aromáticos, que son conocidos cancerígenos”, dijo Tchernitchin.
“Junto al daño inmediato o al día siguiente, como problemas cardiovasculares y broncopulmonares, sus efectos se pueden manifestar mucho tiempo después”, afirmó el académico de la Universidad de Chile. “Los niños y los fetos que tienen órganos en períodos ventana van a absorber esos contaminantes y quedarán alteraciones para toda la vida”.
Girardi, en tanto, anunció que presentará una denuncia penal contra quienes resulten responsables por el delito de tráfico y almacenamiento de residuos peligrosos y que citará a los ministros de Salud y Medio Ambiente, Emilio Santelices y Carolina Schmidt, a la comisión de Salud del Senado que preside, “para evaluar la falta de normas y fiscalización”.
“No puede ser que el Estado de Chile, al igual como ocurre en Ventana, Quintero y Puchuncaví, tenga tan notable abandono de deberes”, sostuvo.
“La falta de fiscalización y de normas son los causantes de este verdadero Chernobyl, que es muy dramático. Cuando se queman neumáticos se liberan dioxinas, que son los cancerígenos más potentes que el ser humano ha sintetizado, porque no existen naturalmente, y agreden a las personas de manera muy rápida”, argumentó.
“Nos parece a tal punto de extrema gravedad, que voy a solicitar a la autoridad que se catastre a toda la población que estuvo expuesta y se le haga un seguimiento de varios años para ver la aparición de enfermedades relacionadas como infartos, accidentes vasculares y cánceres; también a los bomberos que participaron en la extinción del incendio”, añadió.
Finalmente, Girardi consideró “evidente” que no hubo fiscalización al sitio incendiado y que “lo más probable es que no tengan autorización sanitaria ni resolución de impacto ambiental. En ese caso, tienen responsabilidad los ministerios de Salud y Medio Ambiente”.