El 3 de octubre de 2003, el sitio Memoria Chilena fue lanzado. Con ello, la Biblioteca Nacional abrió sus registros a los distintos investigadores, nacionales y extranjeros, que entonces llegaron a golpear la puerta de la institución.
Bernardo O’Higgins, Gabriela Mistral, Pablo Neruda y Juan Emar fueron los nombres que formaron parte de esa primera digitalización de documentos culturales.
Esa irrupción, no obstante, debió enfrentar más de una dificultad: “Hay que ser francos. Fue un proceso que se hizo de apoco, porque entonces, no existía la experiencia y no estaban las competencias. Hubo mucho ensayo y error”, señala el director de la Biblioteca Nacional, Pedro Pablo Zegers, a quince años de ese lanzamiento.
Por su parte, Daniela Schütte, coordinadora de la plataforma, advierte: “Cuando partió todo este asunto, no existían mayores referentes. De hecho, no había ni en Chile ni en Latinoamérica un sitio de características similares”.
Para su puesta en marcha, el sitio de basó en el modelo de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes y el de la American Memory de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos.
Pero, a quince años de esa presentación, la evaluación no puede ser sino positiva: hoy la plataforma cuenta con 970 minisitios, 4 mil 619 libros en línea, 2 mil 583 revistas, 453 periódicos, 4 mil 845 fotografías y 366 mapas, entre muchos otros documentos.
“Es tal el impacto que ha tenido Memoria Chilena en los últimos años que, de alguna manera, no nos hemos dado cuenta de la tremenda utilidad que ha prestado a la sociedad chilena e internacional. Aquí no está toda la cultura chilena, pero hay una buena parte de lo más importante. Lo relevante, es que esto permite mostrar los contenidos culturales de nuestro país”, comenta Zegers.
“Entonces, hay una función social que se está cumpliendo. Hay una función didáctica y de entretenimiento”, agrega.
Según un estudio de usuarios, en 2017, el 51 por ciento de los usuarios eran extranjeros. Al respecto, Daniela Schütte señala: “Efectivamente, estamos contribuyendo a que documentos que antes estaban resguardados bajo un punto de vista muy centralista, ahora también se vayan ampliando y diversificando. Por ende, esta idea de democratizar es muy real”.
El aniversario
El pasado miércoles, Memoria Chilena conmemoró sus 15 años. En ese marco, la institución anunció la creación de una nueva versión del minisitio de Vicente Huidobro.
Esta renovación implica la digitalización de, aproximadamente, 30 primeras ediciones del autor y la creación de 6 nuevas cápsulas sobre la vida del autor en Francia y España, así como sus últimos poemas, novelas y obras de teatro.
También se anunció la publicación del minisitio “La vacunación en Chile”. Esta investigación aborda la llegada de la vacuna a nuestro país y su adopción como política pública.
“Es necesario poner en valor las colecciones, pero desde un punto de vista transversal y accesible”, comenta Daniela Schütte.
La digitalización de los documentos se realiza de acuerdo a un riguroso procedimiento y, por ello, existen diferentes criterios de selección de material como el valor del documento, su estado de conservación, la demanda de los usuarios y el registro en la Ley de Propiedad Intelectual.
Es así, como en el sitio es posible encontrar la colección de telegramas que recibió Gabriela Mistral luego de recibir el Premio Nobel, diversos registros de revistas como El viaje y Ecran, y manuscritos de las primeras versiones del libro Hijo de ladrón.
Los reconocimientos
Durante su trayectoria, Memoria Chilena también ha recibido diferentes reconocimientos, entre ellos, en 2010, el Stockhollm Challenge Award, considerado el premio nobel de Internet.
En 2018, en tanto, fue primer finalista de los premios internacionales Digital Humanities Awards (DHAwards).