El Consejo de Defensa del Estado interpuso una querella criminal por el delito de daño a monumento nacional arqueológico, en calidad de consumado, en contra de todos quienes resulten responsables de los perjuicios ocasionados al geoglifo preincaico conocido como “Gigante de Tarapacá”, ubicado en la comuna de Huara en la Región de Tarapacá.

Representado por su abogado, Marcelo Fainé, el CDE participó en la audiencia de formalización de dos ciudadanos chilenos que poseen nacionalidad belga y de una tercera turista de nacionalidad belga, realizada el pasado lunes en el Juzgado de Garantía de Pozo al Monte, para quienes el tribunal decretó arraigo nacional mientras dure el plazo de la investigación de 30 días concedido al Ministerio Público.

En representación de los intereses del Estado de Chile, el CDE solicitó al tribunal acoger a tramitación su querella por el delito previsto y sancionado en el artículo 38 de la ley Nº17.288, sobre Monumentos Nacionales, en contra de todos quienes resulten responsables en calidad de autores, cómplices o encubridores de los daños ocasionados al geoglifo y “condenarlos al máximo de las penas establecidas por la ley para este tipo de delitos, a las sanciones accesorias, al pago de los perjuicios y demás indemnizaciones que haya lugar, todo ello con expresa condena en costas”.

Asimismo, conforme con el Código Procesal Penal, el Consejo solicitó al Ministerio Público una serie de diligencias de investigación para el esclarecimiento de los hechos.

Al respecto el abogado Marcelo Fainé indicó que el CDE, apenas tomó conocimiento de los daños ocasionados, “actuó con la premura necesaria para proteger los intereses del Estado en este caso, al tratarse de un monumento nacional de invaluable valor arqueológico que pertenece a todos los chilenos, de modo de lograr las sanciones correspondientes y obtener la reparación de los perjuicios ocasionados con la mayor efectividad posible”.