El pasado miércoles 13 de marzo, pobladores de Villa San Luis protestaron durante 6 horas afuera de la sala Ercilla de la Biblioteca Nacional mientras sesionaba el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN). Los pobladores lograron ingresar a pesar de que el edificio estaba custodiado por Fuerzas Especiales de Carabineros.
El objetivo de la movilización era evitar que se aprobara el proyecto presentado por Inmobiliaria Presidente Riesco que busca anular la declaratoria de Monumento Nacional conseguida durante el gobierno de Bachelet. Pasada las 20:30 horas, el plenario del CMN concluyó y los pobladores tuvieron que retirarse sin obtener respuestas sobre los acuerdos tomados.
No obstante, el pasado jueves el organismo señaló, a través de su página web, que se acordó “analizar la nueva propuesta del propietario del terreno –inmobiliaria Presidente Riesco- en orden a construir un memorial en parte del sitio declarado monumento Monumento Histórico en junio de 2017”. También se explica que “el objetivo más importante es la puesta en valor de este monumento y que no se busca desafectarlo de su condición de Monumento Histórico”.
Ana Paz Cárdenas, ex secretaria Ejecutiva del Consejo de Monumentos, explicó que el Consejo está “ratificado la condición de Monumento Nacional del sitio pero que está pendiente avanzar en la conservación del edifico sobreviviente de Villa San Luis”. “Esto en el marco de un proyecto que respete los atributos históricos de la villa y el entorno moderno”, dijo.
Cárdenas opinó además, “que la autoridad ha caído en el error de no mantener informada a la comunidad, lo que es fundamental para poder generar la confianza y el diálogo”.
Por su parte, Jaime Díaz, vicepresidente de Fundación Villa San Luis, valoró la voluntad de diálogo expresada por el CMN, pero adviertó que “el último edificio de la villa sigue en peligro de demolición toda vez que el Consejo de Monumentos no ha descartado el proyecto de la inmobiliaria y dado que el propio subsecretario señaló recientemente que este edificio no sería reparable”.
Respecto de lo anterior, Díaz solicitó al subsecretario Emilio de la Cerda que “explique por qué contradice, desde su opinión personal, un informe técnico del Ministerio de Obras Públicas donde se indica que el edificio si es recuperable”.
Por su parte, Patricio Herman, Presidente de Fundación Defendamos la Ciudad, exhortó a los consejeros a respetar el decreto supremo vigente y a “no permitir que triunfen los intereses de los comerciantes inmobiliarios que buscan hacer un pingüe negocio en el terreno protegido pasando por encima de la institucionalidad y el decreto 135 del MINEDUC”.
En tanto, José Osorio, miembro de la Asociación Chilena de Barrios y Zonas Patrimoniales, destacó “que se abrió una puerta para el diálogo gracias a las movilizaciones del lunes en el Ministerio de las Culturas y del miércoles en el CMN”.
Además, calificó como “inaceptable” que durante la sesión del pasado miércoles se haya dispuesto la presencia de Fuerzas Especiales de Carabineros en la entrada del Consejo de Monumentos.
El dirigente explicó que poco antes de terminar la sesión se habría intentado “sacar a los pobladores del lugar señalándose que iba a entrar carabineros”. Osorio consideró que “esta grave situación no se puede volver a repetir en una institución publica que debe evolucionar, para tener espacios abiertos e informados a la ciudadanía”.