En una reunión de 20 minutos seguida de una conferencia de prensa compartida, los presidentes de Brasil y Estados Unidos sellaron una alianza por la que el país norteamericano otorgará privilegios militares a Brasil y apoyará su entrada a la OCDE.
Donald Trump señaló a los medios que Brasil y Estados Unidos nunca habían estado tan cerca. “Es un gran honor tener al presidente Bolsonaro aquí, ha hecho un trabajo excelente, y compitió en una campaña electoral increíble. Algunos dicen que a la gente les recordaba un poco a nuestra campaña, algo que me honra”,
Por su parte el presidente sudamericano no escatimó en elogios hacia el republicano.
“Aprovecho la oportunidad para invitarlo, será muy bienvenido por el pueblo brasileño pues tenemos muchas cosas en común. Siempre fui un gran admirador de Estados Unidos y esa admiración aumentó con la llegada del presidente Trump al mando. Este encuentro retoma una antigua tradición de amistad y al mismo tiempo abre un camino inédito en la relación entre ambos países. Hoy destrabamos asuntos que estaban en nuestras agendas por décadas y abrimos nuevos frentes de cooperación. Es hora de superar viejas resistencias y explorar el vasto potencial que existe en Brasil y Estados Unidos”.
A su vez, el anfitrión expresó aseguró que “apoya” la entrada de Brasil en la OCDE y anunció su deseo de conceder al país sudamericano privilegios militares similares a los que reciben los aliados estadounidenses miembros de la OTAN.
“En nuestra reunión también discutimos la posibilidad de entablar fuertes lazos económicos entre nuestros países sobre la base de equidad y reciprocidad. El presidente Bolsonaro y yo estamos comprometidos en reducir las barreras arancelarias, facilitar la inversión y apoyar la innovación en un amplio rango de industrias, particularmente, energía, infraestructura, agricultura y tecnología. La visión del presidente de liberar el sector privado y abrir la economía es la manera correcta de que Brasil se fortalezca pues las empresas están listas para trabajar cuando la economía es estable y libre”.
Pese a estas muestras de amistad y camaradería, Jair Bolsonaro se mantuvo al margen de apoyar una intervención militar en Venezuela y manifestó su opción de mantener la vía diplomática en la crisis que vive el país caribeño. Además, en una entrevista con la cadena Fox descartó cualquier nexo con la muerte de la concejala Marielle Franco y aseguró no conocer al ex policía militar que vivía al lado de su casa familiar en Río y que fue acusado de ser el autor material del asesinato de la activista.