Acusado de al menos ocho delitos, el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela fue apresado por la policía política de Nicolás Maduro, en Caracas. Edgar Zambrano es el primero de 10 diputados opositores que, hasta ahora, han sido señalados de haber participado del levantamiento militar del pasado 30 de abril.
Luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) ordenara su enjuiciamiento, en un proceso que ha sido calificado como irregular por incluso magistrados que decidieron no acompañar el fallo, y de que la Asamblea Constituyente se arrogara competencias para allanar su inmunidad parlamentaria, Zambrano fue cercado por funcionarios policiales a las afueras de su partido político, Acción Democrática, y llevado a bordo de su mismo vehículo hasta la cárcel de El Helicoide.
“El régimen secuestró” a Zambrano, denunció en Twitter el jefe parlamentario Juan Guaidó, reconocido como mandatario interino por medio centenar de países y quien lideró la sublevación el 30 de abril. Estados Unidos y varios países de América Latina rechazaron la acción.
Mientras tanto, el presidente de la Constituyente, Diosdado Cabello, afirmó que es apenas el primero de los que han sido acusados hasta ahora y que acciones similares pudieran producirse en os próximos días.
Otros parlamentarios acusados han comenzado a tomar previsiones. La diputada Mariela Magallanes permanece resguardada en la embajada de Italia, mientras que Américo de Grazia dijo en un video que tomaría medidas de seguridad, dando a entender que pasaría a la clandestinidad, por ejemplo.
El TSJ también sindicó por traición a la patria, conspiración y rebelión civil a Henry Ramos Allup -quien se declaró dispuesto a ir preso-, Luis Florido, Simón Calzadilla, Richard Blanco, Freddy Superlano, Sergio Vergara y Juan Andrés Mejía.
La detención de Edgar Zambrano, generó la condena de Luis Almagro, secretario general de la organización de Estados Americanos, y de los gobiernos de Estados Unidos, Canadá, Chile y otras naciones.
La administración de Donald Trump exigió liberar a Zambrano, calificando de “arbitraria” su detención.
“Si no es liberado de inmediato, habrá consecuencias”, señaló un mensaje publicado en la cuenta en Twitter de la cerrada embajada estadounidense en Caracas, que sigue operativa aunque el personal diplomático de Washington en Venezuela abandonó el país petrolero después de que Maduro rompiera relaciones en febrero pasado.
Por su parte, la Unión Europea (UE) pidió el jueves la “liberación inmediata” de Edgar Zambrano.
“La detención del vicepresidente de la Asamblea Nacional, Edgar Zambrano, por la policía secreta venezolana, constituye otra flagrante violación de la Constitución del país”, denunció la portavoz de Relaciones Exteriores de la UE, Maja Kocijancic, en un comunicado.
