Óscar Guillermo Garretón, estrecho colaborador de Salvador Allende y reconocido como uno de los “fundadores” de la Concertación, renunció a su militancia en el Partido Socialista.

El empresario habría tomado la decisión, luego de que, en un reportaje televisivo, se vincularan a personalidades del partido con el narcotráfico en la comuna de San Ramón.

Así, a través de una carta, Garretón reconoció que el Golpe de Estado de 1973 fue el desenlace a una derrota que había partido mucho antes.

Al mismo tiempo, sostuvo que la muerte de Salvador Allende minimizó los errores cometidos por la Unidad Popular.

El economista también planteó una reflexión sobre el actuar de la izquierda en Chile. Por lo mismo, enfatizó: “El socialismos debe cambiar si quiere sobrevivir”.

“Creer que la solución es tener empresas estatales, bancos y AFP estatales, hospitales construidos por funcionarios y un largo etcétera, sólo conduce al imposible de intentar paralizar una sociedad cada vez más incontrolable”, dijo.

“Hasta antes del gobierno de la Nueva Mayoría, la centroizquierda era dueña del prestigio de garantizar buena gobernabilidad en beneficio de todos”, añadió.