Ambos candidatos fueron ministros de Exteriores pero en el bando conservador todo parece oponerlos. Por un lado, el ex alcalde de Londres es un defensor del Brexit duro. Dimitió en 2018 del gabinete de Theresa May criticando su manejo de la salida del Reino Unido de la Unión europea que juzgaba muy blanda.

En el país, Boris Johnson, quien también fue corresponsal en Bruselas del Daily Telegraph, es a la vez criticado por sus comentarios populistas y adulado por su lenguaje sin filtros y a veces contradictorio. Recientemente, Johnson dijo querer un Brexit el 31 de octubre, con o sin acuerdo, para luego retractarse y dejar puerta abierta a otro aplazo de la fecha.

En la otra vereda se encuentra Jeremy Hunt, ex empresario y actual canciller, que algunos han apodado “el Theresa May con pantalones” : muchos consideran que carece de carisma y que tendrá las mismas dificultades que la antigua Premier en negociar un Brexit satisfactorio.

Durante la jornada de este sábado ambos emprenderán una campaña para presentar sus programas a los 160 mil miembros de la formación, que tendrán la última palabra durante una votación organizada a finales de julio.

El vencedor se convertirá en el nuevo líder del Partido Conservador y como tal asumirá el cargo de primer ministro, ocupado hasta ese momento por May, quien se vio obligada a dimitir por su incapacidad para lograr que el Parlamento aprobase el acuerdo de Brexit que negoció con Bruselas.

En todo caso las resistencias políticas quedan intactas frente al próximo líder en el Parlamento, donde los conservadores siguen sin mayoría absoluta, y en Bruselas, que sigue insistiendo en que no está dispuesta a reabrir la negociación.